Un acto para el que los príncipes de Asturias y de Viana, llegaron a Leyre con el repique de campanas del monasterio, donde fueron recibidos, al pie del helicóptero, por el presidente del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz.
En esta primera visita oficial que realizan a una Autonomía después de su enlace matrimonial, el príncipe presidió la entrega al arquitecto Fernando Redón del Premio "Príncipe de Viana" de la Cultura 2004 y el tradicional Homenaje a los Reyes de Navarra.
"Cultura... progreso y libertad
El Príncipe de Asturias y de Viana elogió, en esta décimo quinta edición del Premio que lleva el nombre de los herederos del Reino de Navarra la polifacética actividad del arquitecto galardonado, Fernando Redón, por su aportación innovadora y personal a la cultura común. "La nación que siembra cultura- añadió el Príncipe de Asturias y de Viana- siempre cosecha progreso y libertad", porque ésta, "extendida y compartida por todos es la mejor garantía" de paz, concordia y libertad. El Príncipe expresó, también, el gran afecto que ambos sienten por esta Comunidad Foral, " tierra noble y fecunda".
Asimismo, el Presidente de la Comunidad Foral, Miguel Sanz, aseguró que este Monasterio, regentado por los benedictinos y que data del siglo IX, es una muestra viva de un pueblo de tradición milenaria, que se empeña en conseguir un mundo mejor para todo el mundo.
Ofrenda floral a los Reyes de Navarra
Tras la entrega del Premio, los Príncipes de Asturias se dirigieron a la iglesia del Monasterio, donde se realizó la ofrenda floral. Un acto tradicional en el que don Felipe deposita una corona de flores ante el sepulcro real de la iglesia del monasterio. Como Recuerdo de su visita, don Felipe y doña Letizia recibieron un facsímil del Libro de horas de la Reina María de Navarra, un verdadera obra de arte de la miniatura europea.
Durante esta visita, a la que doña Letizia acudió vestida con un elegante traje rojo, destacar por último que la princesa recibiría su primer ramo de flores de la mano de una niña navarra.