El príncipe Federico participa de incógnito en una carrera de 'mountain bike'

Por hola.com

Mientras el pasado domingo más de doscientas mil personas se echaban a la calle en la capital española para vivir la 30º edición de la Fiesta de la Bicicleta, se disputaba en Dinamarca en el paisaje montañoso de Gribskov (norte de la isla de Selandia) una carrera de mountain bike, la Merida MTB-Marathon, que acaparó también la atención de los medios de comunicación por la sorprendente identidad de uno de sus participantes: Federico de Dinamarca.

De Príncipe de Dinamarca a Frederik Hansen
El deporte y la realeza siempre han hecho buenas migas. Sobran los ejemplos de grandes aficionados a la vela, el esquí, la hípica, el surf..., en las Cortes Reales de Europa; de representantes olímpicos de sangre azul (sólo en la [Familia Real española] tienen el honor los Reyes, el Príncipe de Asturias y la infanta Cristina); de las innumerables iniciativas que promueven los miembros reales con el fin de concienciar a sus conciudadanos de la contribución del deporte a un buen estado de salud, así como de las ocasiones en las que cambian la corona por la gorra, diadema, casco... con fines benéficos.

Pues bien el príncipe Federico es uno de los más fervientes devotos de la práctica deportiva, ya sea de la especialidad que sea. Así que no dudó en participar en la citada competición, aunque lo hizo de incógnito utilizando el seudónimo Frederik Hansen (un apellido muy común en Dinamarca). No obstante, pese a sus esfuerzos para pasar inadvertido, el Heredero danés fue cazado al término de la carrera por el diario local Frederiksborg Amts Avis, que lo sacó en su portada con el rostro y la ropa cubiertos de barro tras la dura prueba. El [príncipe Federico] cubrió los 103 kilómetros de que constaba el trayecto en casi 7 horas y media, casi el doble que el ganador. Pero el buen deportista no se rinde, y el príncipe Federico lo sabe.