La princesa Mary de Dinamarca, deslumbrante en la cena de gala de año nuevo

Las preciosas joyas de la corona fueron las auténticas protagonistas de la velada

Por hola.com

La Familia Real danesa ha celebrado por partida doble la llegada del año nuevo. A la fiesta privada a la que sólo asistieron los miembros de la familia y en la que probablemente cumplirían con todas las tradiciones del país en estas fechas, se unió la cena de gala ofrecida al día siguiente a las autoridades de la nación. Miembros de la nobleza, políticos, militares, diplomáticos y miembros del Gobierno respondieron a la invitación de la reina Margarita y el príncipe Henrik, anfitriones de la velada en el palacio de Amalienborg, en Copenhague, junto al príncipe heredero Federico y su esposa Mary.

La elegancia fue la auténtica protagonista como corresponde a esta clase de evento, en el que fueron las mujeres de la Familia Real las que volvieron a brillar con luz propia. La princesa Mary, con un vestido largo en diferentes tonos de rosa y malva, lució uno de los espectaculares conjuntos de joyas de la Corona danesa: una tiara de diamantes y rubíes con un precioso collar a juego que asomaba bajo el cuello de su abrigo negro. La reina Margarita por su parte escogió las perlas, en su tiara, collar y pendientes que acompañaban un vestido rojo y una estola de piel, necesaria dadas las bajas temperaturas. El príncipe Felipe y su padre, el príncipe Henrik, vistieron el uniforme de gala del ejército.

Los príncipes Federico y Mary volvieron a mostrarse cercanos y cariñosos, un amor que quedó bien reflejado en una colección de instantáneas de la pareja difundidas antes de Navidad. En ellas, el Heredero al trono y su esposa pasean por los jardines del castillo de Fredensborg, su actual residencia, y demuestran lo unidos que están tras casi cuatro años de matrimonio. En esta ocasión sus dos hijos, Christian e Isabella, no formaron parte de esta romántica estampa.