El primer rey que no tuvo un "bautizo-exprés" fue Federico VI, que nació el 28 de enero de 1768 y no fue bautizado hasta el 30. En el caso de Christian VIII transcurrió toda una semana entre su nacimiento y su bautizo en 1786. Christian VIII es el primer rey danés que aparece registrado con dos nombres, Christian y Federico, aunque en aquel momento no se sabía aún que un día reinaría porque su primo, Federico VI, no tuvo hijos a los que dejar el trono.
El 11 de marzo 1899 los cañones dispararon 27 salvas: había nacido un nuevo heredero, el príncipe Federico (que reinaría con el nombre de Federico IX). El anciano rey Cristian IX celebró la ceremonia en el palacio de Sorgenfri el 9 de abril, fecha escogida porque coincidía con el cumpleaños del Rey. Con ocasión del bautizo se hizo una fotografía que reúne a 4 generaciones de reyes daneses: el pequeño Federico, su padre Christian X, su abuelo Federico VIII y su bisabuelo, el rey Christian IX. Se le bautizó con los nombres de Christian Frederik Franz Michael Valdemar Georg. Apenas había pasado una semana desde de que Dinamarca quedara ocupada por los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial, cuando el príncipe heredero Federico (luego Federico IX) fue padre de una niña. El 16 de abril la princesa Ingrid dio a luz a su primogénita, la pequeña Margarita (actual Reina), que recibió las aguas bautismales en la iglesia de Holmens de Copenhague el 14 de mayo, día en que se le puso por nombre Margrethe Alexandrine Thorhildur Ingrid.
Los archivos eclesiásticos que se conservan en Copenhague contienen los nombres que recibieron todos los bebés de la Casa Real danesa cuando fueron bautizados, así como los de sus padres y padrinos. Son muchos los registros que se conservan en dicha lista, aunque no todos, ya que Christian IX nació en Schlesvig, fuera de Dinamarca, y Federico VII no figura en los documentos por razones desconocidas. El primer rey del que se conservan datos en cuanto a padrinos y demás es Christian VI, que llegó a la pila bautismal en brazos de su abuela paterna, la reina madre Charlotte Amalie. Las madrinas siempre eran miembros de la familia real. El primer padrino aparece registrado en 1723, fecha en la que Federico IV llevó a la pila a su nieto Federico V.
