El primer día de guardería de Christian de Dinamarca: un futuro rey

Le acompañaron sus padres, la princesa Mary y el Príncipe Federico

Por hola.com

En brazos de su padre o cogido de la mano tanto del príncipe Federico como de la princesa Mary, el pequeño príncipe Christian de Dinamarca compareció de nuevo ante los medios de comunicación para dejar señalado en su diario una fecha histórica: su primer día de guardería.

Aunque faltan siete meses para que el primogénito de los futuros Reyes cumpla dos años, éstos habían decidido hacía tiempo que empezaría a ir al jardín de infancia con la llegada de su segunda primavera y que el centro estaría cerca de casa. Después de mucho buscar, se decantaron por la guardería pública Reina Luisa de Fredensborg, municipio situado a unos 45 kilómetros al norte de Copenhague, donde está situado el homónimo palacio en el que reside la familia.

Christian se mostró a su llegada a la guardería ligeramente asustado cuando descubrió al gran número de fotógrafos apostados a la entrada del centro. "Está un poco abrumado", dijo la [princesa Mary] al ver que el príncipe vacilaba al entrar en la guardería, donde fue recibido por dos educadores. "No sabe lo que le espera", afirmó el [príncipe Federico].

El primer Heredero de Dinamarca en una guardería pública
El pequeño "Kingaroo", así llamado por algunos periodistas durante los tres meses en los que no tuvo nombre -un juego de palabras formado por King (Rey) y Kangaroo (canguro) por su ascendencia materna-, llevaba en su primer día de estudiante al igual que los hombres rudos de su reino una trenka marinera de color azul marino, pantalón de pana, y unas botas como Dios manda para no quedarse rezagado a la hora de descubrir el mundo entre otros niños daneses.

Una nueva aventura para la que el pequeño Christian está absolutamente preparado, según confirmó la princesa Mary, a la que le quedan unas seis semanas para salir de cuentas. La Heredera contó que su pequeño no traía consigo sus juguetes, pero sí una mochila muy bien equipada y que, pese a su temprana edad, estaba listo para iniciar su currículum. "Creemos que está preparado", señaló la Princesa, quien añadió con orgullo que le vendrá muy bien tener un hermano o hermana pequeño.

Christian, Valdemar, Henry, John, el bebé que descubrimos el día de su bautizo intentando morder la solapa de la chaqueta con enorme determinación a la hora de buscar alimento e inspeccionar con su puño el escote de mamá, es ya un hombrecito dispuesto a recibir la educación que sus padres han decido darle, al menos en los próximos años de infancia. Una formación que le permita vivir y aprender como cualquier otro niño de su edad sin estar aislado del mundo por el solo hecho de haber nacido destinado a ser un día Rey de Dinamarca. De hecho, es la primera vez que un futuro soberano del frío país escandinavo va a una guardería pública, aunque no un miembro de la [Familia Real danesa]. Sus primos Nicolás y Félix, hijos del príncipe Joaquín y la condesa Alejandra, también pasaron por un centro de ese tipo.