Primer viaje de los príncipes Federico y Mary al extranjero tras ser padres

Por hola.com

Los príncipes Federico y Mary de Dinamarca realizaron el pasado fin de semana su primer viaje oficial al extranjero, desde que se convirtieran en padres en octubre. Una visita de dos días a Hamburgo y Kiel (Alemania) en la que los Herederos estuvieron acompañados por su primogénito, el príncipe Christian, de cuatro meses de edad. No obstante, el pequeño no fue visto en ningún momento en público, ya que se quedaba al cuidado de su niñera mientras los Príncipes cumplían el programa previsto, que fue diseñado con "gran flexibilidad" para que la princesa Mary pudiera ir cuando fuera necesario a darle el pecho a su hijo.

La moda del reciclado
Las bajas temperaturas no empañaron el cálido recibimiento que los alemanes dispensaron a los Príncipes. Centenares de ciudadanos, agitando las banderas danesas y resistiendo durante horas el frío polar, aguardaron la llegada de los huéspedes reales en el Kunsthal de Hamburgo para darles la bienvenida. Mereció la pena el esfuerzo. El príncipe Federico y la princesa Mary correspondieron a las muestras de cariño saludando a los asistentes desde la alfombra roja. Los niños de la iglesia danesa, que esperaban a los Príncipes con inquebrantable ilusión y sin perder la compostura, vivieron toda una experiencia cuando la princesa Mary, a la que obsequiaron con un ramo de rosas amarillas, se acercó a saludarlos durante su visita. Era a ella, a quien el público quería ver especialmente. Y la Princesa no defraudó, derrochó simpatía y elegancia durante su estancia en Hamburgo, que concluyó con una cena de gala en la sala de festejos del Ayuntamiento de la ciudad. Al igual que [doña Letizia], la princesa Mary se ha apuntado también al reciclado de conjuntos y repitió modelo. La Heredera danesa lució un traje de noche de la firma Prada, el mismo con el que asistió al cumpleaños del príncipe Enrique, esposo de la reina Margarita, y como adornos, un conjunto de collar y pendientes de plata del joyero Georg Jensen.

La entusiasta acogida que otorgaron en Hamburgo al [príncipe Federico] y la [princesa Mary] fue rebasada, si es posible, por la que les concedieron en Kiel, segunda parada de su viaje. Allí, fueron nuevamente arropados por una gran multitud de niños, que salieron de sus colegios para ver a los Príncipes, y otros tantos admiradores de la capital de Schleswig-Holstein, el estado federal más al norte de Alemania. Al contrario que en Hamburgo, donde la princesa Mary acaparó toda la atención, en Kiel, el príncipe Federico fue aclamado, al igual que su esposa, con grandes vítores. Los Príncipes agradecieron también con cariño la entrega de los ciudadanos y después almorzaron en la sede del consulado danés, un edificio emblemático de la ciudad.