Cinco días en Suráfrica y una apretada agenda para Felipe y Matilde de Bélgica. Los Príncipes Herederos belgas aterrizaron en Ciudad del Cabo con muchos proyectos (especialmente humanitarios) en mente. Matilde de Bélgica optó por acompañar a su marido para conocer mejor la situación de los niños y niñas afectados en este país por el sida. Hace apenas un mes, la Princesa hizo lo mismo en su viaje a Tanzania. Desde que fue nombrada Representante de Unicef para Niños con VIH, Matilde de Bélgica, de 33 años y madre de tres hijos (el pequeño nació el pasado mes de octubre), se ha tomado su labor muy en serio y aprovecha cualquier circunstancia que se le presente para ahondar en el tema. Conocer la situación y buscar soluciones.
Con Nelson Mandela La pareja real tuvo la oportunidad de conocer a uno de los personajes más emblemáticos, para lograr el fin del apartheid en Suráfrica: Desmond Tutu. Poco después han compartido unas horas con otro de los grandes hombres que hicieron posible el fin de la segregación racial: Nelson Mandela. El ex Presidente surafricano, de 87 años, y uno de los hombres del planeta que más hace por lograr una adecuada atención a los enfermos de sida en todo el mundo, recibió a Felipe y Matilde de Bélgica. Y es que para este luchador (a quien en los últimos tiempos se le achacan serios problemas de salud) cualquier ocasión es buena para concienciar a los ciudadanos sobre esta terrible enfermedad que está diezmando la población en algunos países. Matilde de Bélgica está con ellos, como prueba su interés cada vez mayor por visitar in situ países del tercer mundo y entrevistarse con sus líderes políticos para ver cómo puede apoyar las buenas causas tan necesarias.
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