Después de la proclamación de los reyes Felipe y Letizia, ahora todas las miradas se vuelven hacia Federico y Mary de Dinamarca

Por hola.com

 

VER GALERÍA

 

Se estrecha cada vez más el círculo de Príncipes herederos de la generación de nuestros nuevos Reyes de España. Después de la proclamación de Felipe VI, es inevitable preguntarse por el paradero de Federico y Mary de Dinamarca en su camino hacia el trono. Ambas parejas han llevado en los últimos tiempos una vida al mismo son. Desde que anunciaran su compromiso con un mes de diferencia –Mary Donaldson tomó la delantera y formalizó oficialmente su relación con el príncipe Federico el 8 de octubre, mientras doña Letizia y el príncipe Felipe lo hicieron el 6 de noviembre-, han tenido existencias paralelas. A un mismo compás vivieron los preparativos de sus bodas, las ceremonias nupciales, las lunas de miel, la formación de ellas como Princesas, las llegadas de los primeros dos hijos -quince días separan los nacimientos de los príncipes Christian (15 de octubre) y Leonor (31 de octubre) y ocho días los de la princesa Isabella (21 de abril) y la infanta Sofía (29 de abril)-... Ahora todos se preguntan si la racha de coincidencias continuará y si la Casa Real danesa seguirá el ejemplo español, holandés y belga.

VER GALERÍA

 

Las cosas de Palacio van despacio y de momento no hay en Dinamarca movimientos (que se sepan) en esa dirección. A falta por el momento de coronación real, hay coronación deportiva. El príncipe Federico vuelve a proclamarse como el príncipe de hierro al haber completado este domingo en Copenhague un nuevo triatlón, una prueba a la que se ha aficionado en los últimos años. El Heredero danés hizo el recorrido -1,9 kilómetros a nado, 90 kilómetros en bicicleta y 21,1 corriendo- en cinco horas y dos minutos, un minuto peor que cuando hizo otro similar hace un año. "Es igual de bueno, ahora estoy un poco más lento, no estoy tan en forma como el año pasado. Pero estoy satisfecho", declaró a la revista Billed-Bladet. El tiempo le valió para finalizar en el puesto número 29 en la categoría de hombres de entre 45 y 49 años. El príncipe Federico agradeció los gritos de ánimo que le dieron muchos daneses a lo largo del recorrido. "Es muy importante recibir todo ese apoyo, es muy bonito que tantos daneses lo hagan", dijo. El Príncipe ha completado varios triatlones en los últimos años, y en agosto de 2013 se atrevió incluso a participar en Copenhague en un Ironman, una modalidad extrema, el doble que uno normal.

Hay quien encuentra pistas de una próxima sucesión en la mayor actividad de los Herederos. Esta misma semana, por citar un ejemplo, los Príncipes han tenido compromisos hasta el final. La princesa Mary inauguró el pasado viernes una campaña para fomentar la lectura entre los niños en la biblioteca de Roskilde, al oeste de Copenhague. Más de doscientos alumnos de décimo grado de las escuelas de Roskilde llenaron la biblioteca local para asistir al acto. La Princesa, que vistió una blusa negra con una falda de vuelo estival con estampado de flores, les comentó que pensaba que la campaña, bautizada Libro de verano, era una gran idea, porque impulsaba el gusto por la lectura a través de un concurso. "Con los buenos libros, las páginas se dan la vuelta casi por sí solas", dijo la princesa Mary, quien a menudo se siente engullida por la trama de un libro que está leyendo. La Princesa reveló que suele leer mucho en vacaciones, y que en su casa, en la época de descanso, nadie pone el despertador. Mary de Dinamarca tuvo tiempo para saludar y estrechar las manos de muchos de los niños y para charlar con ellos sobre libros y otros temas.

 

VER GALERÍA



La apretada agenda oficial de los príncipes Federico y Mary concluía ayer domingo pocas horas después de que el Heredero completara el durísimo triatlón. El Príncipe apareció vestido con un elegante esmoquin oscuro y acompañado por su esposa, la princesa Mary, con un vestido de encaje negro con escote de palabra de honor, en la gala de entrega de los premios Reumert. Estos premios, que homenajean a las artes escénicas, se entregan cada año en el Teatro Real de Copenhague. Las compañías del propio Teatro Real y el Teatro Aalborg fueron las grandes triunfadoras de la noche. Cada ganador se llevó las 40.000 coronas danesas (algo más de 5.000 euros) con que están dotados estos premios financiados por la fundación Bikuben. Los Herederos ocuparon su asiento en el palco reservado a la Familia Real danesa y desde allí asistieron a una gala que mezcló música, danza y teatro y a la que asistieron representantes del mundo de la política, los negocios y la cultura de Dinamarca. Y reinaron... Una señal, quisieran muchos, de que su coronación tampoco ande lejos.