Tras una amenaza de bomba en su avión, los príncipes Federico y Mary de Dinamarca por fin llegan a Chicago

Sólo resultó ser una broma de mal gusto, que retrasó la salida de su vuelo con rumbo a Estados Unidos, donde permanecerán cinco días en visita oficial

Por hola.com

La Policia se vio obligada a desalojar, por seguridad un avión en el que viajaban los príncipes Herederos de Dinamarca rumbo a Chicago. El príncipe Federico y la princesa Mary vieron cómo su vuelo no salía a la hora prevista del Aeropuerto Internacional de Copenhage debido a una amenaza de bomba.

Finalmente, todo quedó en un susto y las autoridades detuvieron a un individuo, sospechoso de haber dado este falso aviso. Al parecer, todos los pasajeros se encontraban ya acomodados en el avión, a punto de despegar, cuando recibieron el inquietante mensaje.

Alrededor de 250 personas sufrieron una demora de casi tres horas en su viaje a Estados Unidos. En los medios de comunicación daneses se asegura que la amenaza de bomba no fue más que una pesada y macabra broma. Sea como sea, cuando se informó de que podía haber explosivos entre los equipajes alojados en el avión, la prioridad fue poner a salvo a las personas que viajaban en él -incluidos Federico y Mary de Dinamarca-, hasta que comprobaron la veracidad de la información recibida.

"Un hombre joven hizo un comentario acerca del gran dispositivo de seguridad que había en la puerta de acceso al vuelo, diciendo: "Es extraño que no hayan encontrado la bomba que tengo en mi bolsa", aclaró el portavoz de la Policia de Copenhage, Flemming Steen Munch.

Progresa adecuadamente
A pesar de este desgradable incidente, los Herederos al trono danés ya están en Estados Unidos. Los Príncipes permanecerán durante los próximos cinco días de visita oficial y en su agenda tienen programadas visitas a Chicago, Nebraska, Colorado y Nueva York.

Con este calendario de actividades, al príncipe Federico no le quedará más remedio que compaginar los desplazamientos con su inseparable muleta. Aunque ya ha mejorado bastante, tendrá que pasar algún tiempo hasta que se recupere totalmente de la operación para solucionar una fractura en el peroné. El hijo mayor de la reina Margarita pone todo su empeño por seguir con su vida normal. Y, sin perder la sonrisa y el buen humor que le caracteriza, durante las últimas semanas ha lucido muletas de última generación en los actos oficiales.