Los Obama ya tienen su propio huerto en la Casa Blanca

Michelle Obama, junto con 26 escolares, ha comenzado las tareas para transformar parte de los jardines de su residencia en un área de cultivo con el fin de educar sobre la importancia de una alimentación sana

Por hola.com

Los Obama continúan su proyecto de cambio de look de la Casa Blanca. Tanto el Presidente como su esposa quieren renovar cada rincón de su nueva residencia de Washington y ellos mismos participan encantados en las diversas tareas. Si hace unas semanas era Barack Obama quien mostraba los nuevos columpios que se han colocado en los jardines, ayer fue la misma Michelle quien no dudaba en remangarse para poner en marcha su nuevo proyecto.

Los jardines de la Casa Blanca contarán con un huerto urbano. Para ello, la Primera Dama, con la ayuda de 26 alumnos de quinto grado de una escuela de Washington, empezó a excavar en el área escogida para los nuevos cultivos. La huerta será lo suficientemente grande como para que los viandantes puedan verla desde la calle y producirá unas 55 variedades de fruta y verdura ecológica. Uno de sus objetivos es educar sobre la importancia de la alimentación sana y una buena nutrición. La Primera Familia cultivará y comerá sus propias lechugas, guisantes, cebollas y rúcula (una variedad que al Presidente le gusta mucho), entre otros productos.

Un espacio para dos colmenas
El buen tiempo acompañaba a los jóvenes escolares en su importante tarea de retirar la hierba y de allanar el terreno para poder comenzar a sembrar en un par de semanas. La primera cosecha será en abril. Pero no todo fue trabajar. A mediodía, los pequeños hicieron un parón para un pequeño tentempié. En varias mesas se dispusieron manzanas, galletas con formas de pala y termos con zumo como premio.

Entonces, Michelle -que cambió sus elegantes trajes por unos leggings negros, un blusón y unas botas planas- les explicó que este proyecto es para que en la Casa Blanca nunca falten las verduras y que sus invitados puedan degustar alimentos saludables. Además, contó que a sus hijas, las pequeñas Malia y Sasha, no les gusta mucho la fruta pero que esta idea les hace ilusión. "Prefieren las verduras si saben bien... especialmente si participan en plantarlas y en recolectarlas", dijo.

No obstante, no es la primera vez que en la residencia del Presidente se busca un lugar para cultivar. Al parecer, Eleanor Roosevelt, esposa del presidente Franklin Delano Roosevelt plantó su propio huerto en tiempos de la Segunda Guerra Mundial con el objetivo de dar ejemplo a los ciudadanos americanos de tener hortalizas en los momentos más difíciles. Este nuevo espacio del jardín contará además con dos colmenas de abejas para producir miel, que serán supervisadas por uno de los cocineros de la casa que es un aficionado de la apicultura.

Y, entre tantos productos, surge la pregunta: ¿qué se hará con lo que no se utilice? El Presidente y su esposa lo tienen todo controlado. Todos los excedentes serán donados a Miriam’s Kitchen, un centro próximo a la Casa Blanca que se encarga de repartir alimentos entre los pobres.