Una sinfonía de notas de homenaje, de apoyo y de solidaridad, entonada a una voz por la sociedad española, vibró ayer en el Auditorio Nacional con motivo del Concierto In Memoriam 11 de Marzo. Los Príncipes de Asturias tomaron anoche la batuta de esta orquesta sinfónica de España, con 2.300 integrantes en el escenario entre familiares, representantes institucionales (Gobierno, oposición y altos cargos de la Justicia) e integrantes de servicios de emergencia, para tocar una canción de paz y esperanza frente a la brutal barbarie. Un concierto homenaje a las víctimas del 11-M, a sus seres queridos y a los miembros del Samur, bomberos, policías y forenses, que intervinieron tras el atentado del que se han cumplido 5 años.
El recital, organizado por la Fundación de Víctimas del Terrorismo, que preside Maite Pagazaurtundúa, en colaboración con el Ministerio de Cultura, el Gobierno regional madrileño y el Ayuntamiento de la capital, siguió una partitura llena de intenciones: transmitir que toda la sociedad española está con las víctimas, confortar a las familias para hacer más digerible el recuerdo y honrar a los que faltan a través de la música, más allá de una única lengua y una única nación, "como las propias víctimas de hace cinco años".
Un minuto de silencio, contrapunto entre el duelo y la esperanza, dio el tono a la voz. "Me gustaría deciros que hemos cometido muchos errores, pero que la sociedad española os necesita como signo permanente de la búsqueda de la justicia frente a la barbarie", ha afirmado la Presidenta de la FVT, antes de recalcar: "Os necesitamos para orientarnos y hacernos merecedores de vuestro respeto". La cadencia de la palabra afinaba con el programa musical de este homenaje: tras la interpretación del himno nacional, la obertura de Los esclavos felices, de Juan Crisóstomo de Arriaga; el concierto para violonchelo y orquesta en la menor de Robert Schumann, y la sinfonía número 91 en mi bemol mayor de Joseph Haydn, por la Orquesta de la Comunidad de Madrid, bajo la dirección de José Ramón Encinar.
Al son de aplausos hicieron entrada los Príncipes de Asturias al Auditorio Nacional de Música, donde, junto a Pagazaurtundúa, también les esperaban la Presidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia Casas, y el Presidente del Tribunal Supremo y el Consejo General del Poder Judicial, Carlos Dívar, así como el Defensor del Pueblo, Enrique Múgica. La Vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega; la Ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, y el Secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, representaron al Ejecutivo en este homenaje, al que han acudido, en nombre del PP, el líder del partido, Mariano Rajoy; la Secretaria General, María Dolores de Cospedal, y la Portavoz Parlamentaria, Soraya Sáenz de Santamaría. A continuación, [don Felipe] y [doña Letizia] saludaron a los representantes de las víctimas: Juan Antonio García Casquero y Ángeles Pedraza (Asociación de Víctimas del Terrorismo), Pilar Manjón y Jesús Abril (Asociación 11-M Afectados de Terrorismo) y Ángeles domínguez y Eduardo León (Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M).
Los héroes del 11-M El homenaje se ha extendido además a "los héroes anónimos que actuaron hace cinco años sin pensar en el riesgo ni en la fatiga", según ha definido Pagazaurtundúa- en una referencia rubricada con aplausos- a los numerosos integrantes de servicios policiales, emergencias y de la Guardia Civil, presentes en la sala. En representación de todos ellos, los Príncipes saludaron al enfermero del Samur-Protección Civil Francisco Torres García, que improvisó un puesto médico avanzado para facilitar la primera asistencia a los heridos, así como al bombero del Ayuntamiento de Madrid Antonio Avilés, al policía municipal madrileño Pedro Ortiz y al policía nacional Juan Francisco Pérez Granados.
