Los 'mejores amigos' de la realeza

Sofía de España, Isabel de Inglaterra, Margarita y Mary de Dinamarca, Victoria y Magdalena de Suecia sienten profunda adoración por sus perros, a los que cuidan con esmero y dedicación

Por hola.com

Un hogar sin perro es para muchos como un jardín sin flores. Aunque este se trate de un magnífico palacio con todas las comodidades y distraciones. Los miembros de la realeza, como el resto de los mortales, también se hacen acompañar del mejor amigo del hombre. Mascotas que miman y cuidan con esmero y dedicación y que, en algunos casos, disfrutan como ellos de toda clase de lujos.

Así es para la [Familia Real danesa]. La reina Margarita y su esposo, el príncipe Henrik, nunca han dudado en mostrar en público el enorme cariño que sienten por sus perros teckel. No es raro, de hecho, ver a sus apreciados animales en su regazo, lamiéndoles la cara y posando como un miembro más de la familia en las fotos oficiales de Navidad. Pero no sólo los soberanos se han rendido a los encantos de estos compañeros de cuatro patas. Los príncipes Federico y Mary, siguiendo su ejemplo, adoptaron antes de la llegada de los hijos a Ziggy, un cachorro de border collie, que se ha convertido en un excelente compañero de juegos de sus pequeños, los príncipes Christian e Isabella. Un simpático perro, de ojos azules y largo pelaje canela y blanco, por el que la [princesa Mary] siente debilidad, aunque eso suponga madrugar más para sacarle a pasear por los jardines de su residencia. Hasta tal punto los perros llegan a ser uno más del clan que se han convertido en ocasiones en motivos de disputa, como en el proceso de divorcio del príncipe Joaquín y la condesa Alejandra.

Los canes son en muchos casos grandes amigos de la niñez. Es el caso de Jumbo, el perro labrador de la [princesa Victoria]. La Heredera sueca creció junto a este simpático animal al que dio un lugar privilegiado en retratos oficiales, en las tradicionales celebraciones de sus onomásticas y cumpleaños con sus conciudadanos y, por supuesto, en su vida. Jumbo sigue siendo su compañero de viaje en esta nueva etapa de su existencia tras independizarse. Menos popular es Zorro, el perro de la [princesa Magdalena], al que hemos visto en contadas ocasiones cuando la hija pequeña de los reyes Carlos Gustavo y Silvia de Suecia le ha sacado de paseo por las inmediaciones de su residencia.

La soberana inglesa aprecia tanto a los animales que no concibe su hogar sin mascotas. Y no han sido precisamente pocas las que han disfrutado de las comodidades palaciegas. A lo largo de su reinado, Isabel II ha sido dueña de más de 30 perros corgi, raza canina preferida por Su Majestad. El primero fue un regalo por su 18º cumpleaños, su nombre era Susan, y muchos de los corgis que tiene en la actualidad (Emma, Linnet, Monty, Holly y Willow) son descendientes de ella. La Reina, no cabe duda, aparecerá en los anales caninos por su amor a los perros pero, especialmente, por haber introducido en el mercado una nueva raza, llamada dorgis, cuando uno de sus corgis se cruzó con el dachshund de la princesa Margarita. Pero Isabel II también presta sus atenciones a otras razas como pueden ser los labradores o cocker spaniels.

Y de tal Reina, tal Princesa. Su nieta Beatriz ha heredado su pasión canina. La joven ha crecido con una amante de los perros en mayúsculas y ha seguido su mismo ejemplo. Tanto quiere a su adorable Max, un terrier de Norfolk rubio rojizo, regalo de cumpleaños de hace siete años, que incluso tiene un bolso con una fotografía de la cara del perro impresa en él y organizó un verdadero dispositivo de búsqueda para encontrarle, tras un monumental disgusto por haberle perdido en el Great Park de Windsor. Y es que las mascotas acarrean a veces a sus dueños importantes preocupaciones, pero siempre compensan las alegrías.