La emperatriz Michiko celebra su 74º cumpleaños arropada por la Familia Imperial de Japón al completo

Por hola.com

Aparte de satisfacer la curiosidad de los japoneses sobre los asuntos capitales que acontecen en palacio durante una entrevista difundida por la Agencia de la Casa Imperial con motivo de su 74º cumpleaños, la emperatriz Michiko de Japón marcó también su aniversario con una fiesta privada en su residencia de la Ciudad Prohibida rodeada de todos los suyos.

Habló a las claras sobre algunos temas espinosos. Se solidarizó con las víctimas del terremoto del pasado mes de junio en el nordeste de Japón, en el que murieron diez personas y fueron destruidas numerosas viviendas; manifestó su preocupación por el estado de salud del emperador Akihito, también de 74 años, a quien se le diagnosticó riesgo de padecer osteoporosis y que se encuentra bajo tratamiento médico desde que fue operado de un cáncer de próstata en 2003, y se refirió a lo orgullosa y feliz que se siente al ver crecer a sus cuatro nietos, así como a los buenos resultados en su primer curso de escuela de la princesa Aiko, de 6 años, hija de los Herederos de la Corona. La única cuestión por la que pasó de puntillas fue la depresión, a causa del estrés, de la princesa Masako, porque los médicos creen que hacer comentarios públicos no ayuda a que se recupere. No obstante, la Emperatriz indicó que la Heredera es "una persona muy querida por el Príncipe y por toda la familia y seguiré rezando por su recuperación".

Festejó su aniversario en privado, acompañada de la Familia Imperial al completo. La señalada fecha se convirtió en otra magnífica ocasión para que la Emperatriz disfrutara de una velada de celebración con sus hijos y sus cuatro nietos reunidos. Arroparon a la soberana en este día, además de su esposo, el emperador Akihito; los príncipes herederos Naruhito y Masako, muy elegante con un traje azul y sombrero pillbox a juego, con su única hija, la princesa Aiko, y los príncipes Akishino y Kiko, con sus tres hijos, las princesas Mako y Kako, de 17 y 13 años, y el príncipe Hisahito, el primer varón nacido en más de 40 años en la Casa Imperial. Coronaron el encuentro familiar los brindis, la tarta, los deseos y los regalos de cumpleaños.