No cabe ninguna duda de que Kalina de Bulgaria tiene un personalísimo estilo de vestir que queda patente cada vez que se la puede fotografiar, bien sea en los escasos actos oficiales a los que acude o en su ámbito cotidiano. En esta ocasión, ha podido de nuevo constatarse cuando estos días salía de compras, quizá pensando ya en los regalos de Navidad para su esposo, Kitín Muñoz, y su familia. La princesa, embarazada de siete meses de su primer hijo, lucía un «look» «descuidado-cuidadísimo», al que muchos jóvenes son muy aficionados hoy en día. Pantalón vaquero de cadera baja y cinturón rojo y verde, de Gucci, como también lo era el llamativo bolso de piel de gran tamaño que llevaba al hombro. Blusa blanca, jersey negro y bolero drapeado. Un pañuelo colocado en la cabeza al estilo pirata, sobre el que se apoyaban las gafas de sol; maquillaje muy blanco y labios pintados de rojo intenso.
Nacerá en Bulgaria Hace dos meses, [Kalina de Bulgaria] anunciaba su embarazo tras la inauguración de la nueva capilla de San Iván de Rila, erigida en el patio del palacio de Tsarska Bistritsa —propiedad de la Familia Real búlgara —, el mismo lugar donde la princesa se convirtió en la esposa de Kitín Muñoz. Según se dijo, el nacimiento del bebé, undécimo nieto de Simeón y Margarita de Bulgaria,se producirá a finales de enero o a principios de febrero. Con su anuncio en Bulgaria, la princesa tenía una nueva deferencia con el país de sus antepasados. Kalina declaraba en una entrevista a un diario búlgaro que ella preferiría no saber el sexo de su bebé hasta el día de su nacimiento.
Una decisión que corroboró su marido, Kitín Muñoz durante la celebración del Moussen, un festival tradicional que se celebra en Marruecos y que muestra el folclore y las costumbres de las tribus nómadas del Sahara. El explorador, que colabora activamente en la organización de esta fiesta, añadió que el bebé nacerá en Bulgaria, algo que hace muy feliz al padre de la Princesa, el rey Simeón.
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