Los Príncipes se enamoran

Por hola.com

También es de suponer que influyera los relatos de su tía abuela, la princesa Margarita, que lo convirtió en su refugio (amén de escenario de escándalos). Pero el ser segundo en la línea de sucesión al Trono británico tiene estas cosas: que se vaya de vacaciones con su novia es susceptible de situar una cohorte de fotógrafos hasta en los rodapiés del chiringuito. Es decir, que no se ha librado de ser inmortalizados durante sus días de asueto en el paraíso. Románticas vacaciones en las que no han faltado jornadas marineras y baños en alta mar.

Kate, al descubierto
Entre Guillermo, de veintitrés años, y Kate, de veinticuatro, ya se puede hablar de una relación consolidada. Y lo que es más importante: cuenta con la bendición de la Familia Real. De hecho, los diarios sensacionalistas no han dejado pasar la oportunidad de relacionar esta escapada con una posible petición de matrimonio del príncipe Guillermo. A la pareja le une tres años de relación, desde los tiempos en que compartían piso de estudiantes en la Universidad de Saint Andrews. Desde entonces, cada vez ha sido más frecuente verles juntos. El paso fundamental en su relación llegó cuando el Príncipe de Gales invitó a Kate a esquiar en Suiza con la familia, y el definitivo, cuando hace unos meses fue invitada por la Reina al balcón de Buckingham Palace.

Entre tanto, en este exótico viaje, la pareja ha disfrutado como dos enamorados. Por cierto, que es la primera vez que hemos podido ver a Kate en biquini, luciendo una espléndida figura hasta ahora oculta siempre bajo ropas menos ceñidas y escuetas. El cadete Windsor ha hecho de esta forma su primera escapada de la férrea disciplina de Sandhurst, donde en enero comenzó su formación como oficial.