Masako reaparece durante el tradicional saludo de Año Nuevo

Tras ser vista hace unos días con motivo del 72º cumpleaños del emperador Akihito, la esposa del heredero al trono japonés volvió a dejar su aislamiento para saludar a sus súbditos desde el Balcón del Palacio Imperial de Tokio

Por hola.com

A pesar de sus escasas apariciones públicas en los últimos meses, la princesa Masako de Japón parece que se recupera de la depresión que la ha tenido apartada de sus compromisos oficiales en los pasados tres años. A juzgar por las últimas presentaciones en público que ha realizado recientemente desde el balcón del Palacio Imperial de Tokio, se podría decir que la esposa del heredero al trono del Crisantemo va retomando poco a poco sus obligaciones como miembro de la [Familia Imperial japonesa].

La última de estas apariciones tuvo lugar el lunes, acompañando a su esposo Naruhito, al hermano de éste, Akishino, y a los emperadores Akihito y Michiko durante los tradicionales augurios de Año Nuevo. `[Masako] fue vista hasta tres veces en el balcón acristalado del palacio Chowaden -gesto significativo, ya que el año pasado sólo salió una vez - sonriente y saludando con la mano a los más de 50.000 japoneses que, a pesar de las fuertes lluvias, se congregaron frente al Palacio Imperial con banderitas del país y exclamando ‘banzai’ (que significa ‘larga vida’), siguiendo así con la tradición.

En otra de sus escasas apariciones públicas del pasado año, la Princesa heredera se unió a su esposo, el príncipe Naruhito, para celebrar el 72º cumpleaños del [emperador Akihito] el 23 de diciembre. Con un saludo tímido, pero perseverante, Masako de Japón se dirigió a una multitud de 14.000 admiradores congregados ante el balcón de palacio, despertando nuevos comentarios sobre su delicado estado de salud y su lenta recuperación, que no le permiten retomar plenamente sus obligaciones oficiales.

Deseos de paz de Akihito
Por su parte, el [emperador Akihito] formuló deseos de paz para el nuevo año y quiso rendir homenaje en el sesenta aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial a los compatriotas que perdieron la vida en el conflicto.

Además, el emperador nipón ha mostrado en los últimos días su apoyo a la reforma de la ley de sucesión imperial que permitiría a las mujeres y, por tanto, a su nieta Aiko -que cumplió cuatro años en diciembre- llegar al trono de Japón.