La princesa Masako vuelve a sonreír en público

Por hola.com

Se ha pasado más de un año alejada de sus deberes oficiales, recluida en Palacio para recuperarse de una depresión por un "problema de adaptación" al estricto protocolo de la Corte imperial y aunque a principios de año los portavoces de la Casa Real nipona aseguraron que retomaría su agenda oficial -de hecho el primer día de este 2005 se unió brevemente al emperador Akihito y otros miembros de la Familia imperial en el balcón de Palacio para saludar a miles de admiradores en el tradicional rito de Año Nuevo- lo cierto es que cada una de sus apariciones públicas vuelven a convertirse en noticia, dada su irregularidad.

Y es que tras fotografiarse junto a su esposo y su hija, la princesa Aiko, en la nieve a finales del mes de febrero, se esperaba su presencia dos días después en la ciudad de Nagano donde estaba previsto acompañara a su esposo en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de invierno y en un partido de hockey. La cita fue cancelada finalmente y su ausencia se volvió a notar hace poco más de un mes cuando el príncipe Naruhito recibió primero a los Príncipes de Holanda, Guillermo y Máxima; días después a los daneses, Federico y Mary y al príncipe [Andrés de Inglaterra] en solitario. Volvían a surgir entonces los rumores acerca de la "frágil" recuperación de la Princesa anuncia por los portavoces de la Casa Real nipona.

Su primer acto oficial
Las especulaciones cesaban la semana pasada cuando la princesa Masako hizo su primera aparición pública en meses en un acto oficial junto a su esposo, el príncipe Naruhito, en el que curiosamente no se esperaba su presencia. De ahí que la prensa del país hablara de una "extraña" aparición. Masako acudió junto al heredero al trono de crisantemo a una ceremonia celebrada en la oficina de UNICEF en Tokio con motivo del 50 aniversario de su apertura.

Aunque ninguno quiso hacer declaraciones, Naruhito y Masako, que vestía traje negro, mostraron una imagen relajada y feliz. La misma que se repitió este fin de semana, cuando la Princesa acudió junto a otros miembros de la Familia Real nipona al aeopuerto de Tokio para despedir a los emperadores Akihito y Michiko, quienes comenzaron ayer una visita oficial de ocho días a Noruega e Irlanda, un viaje -el tercero del matrimonio a estos dos países- que tiene objeto mejorar su relaciones con estas dos naciones. Sonriente y con un aspecto muy saludable, Masako decía adiós con su mano junto a su marido y sus cuñados, la princesa Sayako y el príncipe Akishino, ambos hermanos del príncipe Naruhito.

Durante su visita, que comienza en Noruega y que coincide con el centenario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre Japón y el país nórdico, los Emperadores de Japón serán recibidos por la [Familia Real noruega]. La pareja imperial no realizaba un viaje al extranjero desde 2002, año en el que visitaron Polonia, Hungría, República checa y Austria.