La boda de Camilla con el príncipe Carlos, heredero de la corona británica, atraerá irremediablemente las miradas hacia sus dos hijos: Tom, de 30, y Laura, de 26 años, respectivamente, de los que poco se sabe hasta el momento, aunque gracias a la boda de su madre hayan pasado a formar parte de la Familia Real Británica como hermanastros de los Príncipes Guillermo y Harry e hijastros del heredero al trono. De hecho, el príncipe Carlos, a sabiendas de que la vida de los jóvenes cambiará para siempre después de su boda ha querido asegurarse de que no tengan problemas económicos en el caso de que él muera inesperadamente. Así, y en línea con esta información, ha trascendido recientemente que Carlos ha creado para ellos un fidecomiso de tres millones de euros. "A efectos prácticos, el Príncipe Carlos ahora tiene una segunda familia", manifestó una fuente real. "Está decidido a que a Laura y Tom se les cuide y se les apoye si a él le ocurriera lo peor". El Príncipe Carlos ha desempeñado el papel de padrastro durante mucho tiempo tomando posturas radicales con ellos en momentos muy delicados de su vida y de su educación. Así, en 1999, cuando el consumo de drogas de Tom se hizo público, Carlos tomó la estricta determinación de prohibirle acercarse al círculo de Guillermo hasta que estuviera limpio. Y Laura, una vez trabajó de camarera y friegaplatos por cinco euros la hora en un café, después de que el Príncipe le dijera que lo consideraba una buena experiencia para una joven de 21 años.
Tom, el cocinero Tom (1975) y Laura (1979) se criaron con sus padres Camilla Shand y Andrew Parker Bowles -contrajeron nupcias en 1973 y se divorciaron en 1995- en Middlewick House, en la finca familiar de Wiltshire. Tom asistió a Eton College, la prestigiosa escuela que también cuenta con sus futuros hermanastros reales como alumnos, y luego pasó a estudiar filología inglesa en Oxford. En cuanto a Laura, fue alumna, en régimen de internado, al convento de Santa María en Shaftesbury, Dorset, continuando su educación en la Universidad de Oxford Brookes, donde estudi historia y mantuvo un perfil discreto.
