Marbella se ha vestido de luto por la muerte del príncipe Alfonso de Hohenlohe-Lengenburg. A sus 76 años, el hijo del príncipe Maximiliano y de la princesa Piedad Iturbeque y ahijado del rey Alfonso XIII y la reina Victoria Eugenia, nos dijo adiós para siempre en su residencia de Marbella, ‘La Casita del Príncipe’.
'Príncipe de la Costa del Sol
Desde muy temprana edad Alfonso de Hohenlohe fue dando muestras de ser un excelente hombre de negocios. Con tan sólo 22 años comenzó a realizar fuertes inversiones en Marbella. Lo que le convirtió en el promotor por excelencia de la Costa del Sol. Además de trasladar el lujo y el glamour a Marbella, ciudad que la alta sociedad de medio mundo conoció de su mano, fue el fundador de importantes restaurantes, urbanizaciones como Puente Romano y hoteles tan conocidos y emblemáticos como el Marbella Club.
La capilla ardiente del Príncipe será instalada el próximo viernes 26 en el Ayuntamiento de la localidad malagueña y ese mismo día se oficiará un funeral en la iglesia de la Encarnación por el eterno descanso de su alma. Tras el velatorio, los restos mortales de Hohenlohe recibirán sepultura en el panteón familiar del cementerio de San Bernabé.
