La primogénita de los Reyes de España, la [infanta Elena], cumplió ayer cuarenta años. Una fecha muy especial que vivió rodeada de sus seres más queridos. Todos los años, la reunión familiar en torno al cumpleaños de la infanta se convierte en un preámbulo para las cálidas fiestas navideñas que se aproximan. Y este año no podía ser menos. No faltó durante la velada la tarta, las velas, y las felicitaciones de los suyos... Eso sí, en forma de sorpresa.
Fiesta sorpresa en La Zarzuela La Zarzuela se vistió de enigma durante unos días. Los días que emplearon la infanta Cristina y don Jaime de Marichalar para tenerlo todo listo para una fiesta sorpresa en honor a doña Elena. La lista deinvitados se iba engrosando hasta alcanzar la nada desdeñable cifra de doscientos invitados. Todos ellos guardaban una relación muy estrecha con la Familia Real, en especial con la infanta Elena, homenajeada por su aniversario. En la lista de invitados se encontraban, cómo no, el Príncipe de Asturias y su prometida, doña Letizia, que habían pasado toda la jornada en el Principado visitando a los abuelos paternos de doña Letizia.
Un año muy duro para la infanta La infanta tratará de olvidar hoy los duros momentos que ha vivido en este año. En especial, la pérdida del niño que ella y su marido esperaban. La infanta, de 39 años, tenía una enorme ilusión por dar un hermanito más a Froilán y Victoria Federica. Sin embargo, un día después de que los Reyes de España anunciaran oficialmente que la infanta estaba embarazada de tres meses, la duquesa de Lugo fue ingresada de urgencia en el hospital porque sufrió, el 25 de junio de 2003, un aborto espontáneo.
Vuelta de Nueva York Dentro de la tristeza lógica por la pérdida, al menos la infanta sufrió tan inesperado aborto en España. Como recordarán nuestros lectores, Elena de Borbón y Jaime de Marichalar, tras la isquemia cerebral del duque el 22 de diciembre de 2001, vivieron una temporada en Nueva York (siete meses desde octubre de 2002), donde Jaime de Marichalar siguió un férreo programa de rehabilitación para superar las secuelas de su enfermedad.
Espléndidos 40 años A pesar de tantos problemas, la infanta Elena ha mantenido en todo momento una actitud cercana y elegante. Una elegancia, externa e interna, que le ha valido a la primogénita de los Reyes [para convertirse en una de las diez mujeres más elegantes del mundo,] al parecer de los internautas de hola.com. Para muchos, el empaque y la elegancia de la infanta Elena afloraron en la treintena. Ahora, en el umbral de los cuarenta, con dos hijos, y cientos de ilusiones por delante, la infanta volverá a sorprender, por su brillo natural...
