Todo son controversias. Una encuesta judicial francesa -celebrada a puerta cerrada- ha culpado al chófer, Henry Paul, por haber consumido bebidas y medicamentos y por exceso de velocidad. Sin embargo, un libro del mayordomo de Diana, Paul Burrel, publicado por entregas en el Daily Mirror, ha planteado nuevas preguntas al revelar que ella temía un accidente de coche. Diez meses antes de su muerte Diana escribió acerca de un "fallo de frenos" y "graves daños cerebrales" que dejarían libre el camino a Carlos para volver a casarse. Esta misma semana Mohamed al Fayed, padre de Dodi, acudió a un tribunal escocés para intentar ganar una investigación pública. Afirma que Diana, de 36 años, y su hijo, de 42, estaban siendo espiados por el M16. De esta manera, Mohamed al Fayed afirma que la Agencia Nacional de Seguridad de EEUU ha confirmado que la princesa era objeto de vigilancia de agentes estadounidenses, posiblemente en nombre del M16.
Clarence House apuesta por una investigación clara Clarence House aseguró: "Siempre hemos entendido que la ley exigía una encuesta judicial en algún momento". Está estipulada una audiencia para cualquier "muerte innatural o violenta en el extranjero" cuando el cadáver es devuelto a nuestro país". No obstante, parece ser que será "altamente improbable" que el príncipe Carlos o cualquier otro miembro de la familia real sean llamados a declarar en las encuestas judiciales. Tanto el palacio de Buckingham como Clarence House, residencia del príncipe, han mantenido reuniones y se han ofrecido a cooperar.
Incertidumbres El único superviviente, Trevor Rees-Jones, el guardaespaldas de Dodi, no puede recordar ningún detalle. Prácticamente ningún otro testigo, incluyendo los paparazzi que se encontraban en la escena, puede ser obligado a testificar. Los cargos de homicidio involuntario contra los fotógrafos que siguieron al coche o que tomaron fotos del lugar también han sido retirados. Burgess, investigador de muertes violentas de la Casa Real, dijo que no llamaría a testigos en las investigaciones iniciales. La encuesta judicial sobre Diana se abrirá en el Centro de Conferencias Elizabeth II. La de Dodi comenzará el mismo día un poco más tarde. Se espera que, al fin, entre la luz en un caso tan turbio y complejo.
