Estefanía de Mónaco celebró su 38º cumpleaños disfrutando en familia de una de sus grandes pasiones, el circo. Acompañada de su padre, el príncipe Rainiero, y sus tres hijos, Luis, de diez años, Paulina, de ocho, y Camila, de cuatro, la Princesa acudió al Festival de Rampe, un concurso en el que, desde hace 15 años, compiten las escuelas de circo más prestigiosas del mundo.
Esta ha sido la segunda ocasión en pocos días en la que hemos visto al príncipe Rainiero disfrutando junto a su hija menor y sus nietos de una agradable circense. La reciente celebración del Festival de Circo de Montecarlo permitió ver, un año más, a la Familia Real de Mónaco pasando un buen rato bajo la carpa. Cabe recordar que Rainiero inculcó a Estefanía su amor por este arte y que ella y sus hijos incluso llegaron a convivir, durante su noviazgo con Franco Knie, con los artistas del Circo Knie.
No hay duda tampoco de que sus hijos son, además, ya todos unos entendidos en esta materia. Paulina llegó a participar en un arriesgado número de elefantes con Knie y en el Festival de Circo de Montecarlo, Luis, Paulina y Camila, vestida de payaso, sorprendieron a su abuelo interpretándole un breve número circense después de entregarle el 'Clown Honorífico de Oro' en reconocimiento a su gran labor en apoyo del mundo del circo.
Sin embargo, no estaban en la celebración del cumpleaños de la Princesa los dos hermanos de Estefanía, Alberto y Carolina. Ese mismo día la princesa Carolina asistía a la cena del vigésimo aniversario del Forum Grimaldi, a la que también acudió el cantante italiano Andrea Bocelli.