Victoria de Suecia o la princesa consciente de sus obligaciones llegó a España en labores de embajadora real. Bella y contenida, la joven, nacida el 14 de julio de 1977, sabe asumir responsabilidades y lo hace con la mejor de sus sonrisas. Ahora está en Madrid para traernos Aires de Suecia y, sobre todo, toques de cultura de su país.
La Semana Sueca de la Cultura nos invita a contemplar paisajes, a buscar sabores, a pasear por sus bosques y, sobre todo, a buscar maneras de afianzar la excelente relación que ya existe entre ambos países. Victoria de Suecia asume su condición de heredera y, en sustitución de su padre, el rey Carlos Gustavo, y su madre, la reina Silvia, ha llenado Madrid de sonrisas inteligentes y palabras cautas (no en vano es licenciada en Ciencias Políticas por la Universidad de Upsala y máster en Historia). Cuando la belleza se une con la inteligencia, ambos componentes pasean de la mano con la sensibilidad y la constancia, y, además, corren por sus venas sangre azul, la imagen de Victoria de Suecia aparece en nuestras retinas. Por el regalo de su visita.
