Marta Luisa y Ari Behn disfrutan de Palma de Mallorca

La pareja acompaña y anima al rey Harald de Noruega, que participa en la regata Breitling

Por hola.com

Marta Luisa y su marido, el escritor Ari Behn se encuentran desde el viernes en Palma de Mallorca, donde asisten como espectadores [la regata Breitling] que se celebra este fin de semana en aguas de la Bahía de Palma y en la que compite el su padre, el rey Harald de Noruega.

La pareja, que al igual que su padre se aloja en el yate real Norgue, atracado en la base naval de Portopí, ha seguido las dos jornadas de la regata a cierta distancia en una zodiac junto a algunos amigos.

Ari Behn luce un tatuaje en el brazo
Marta Luisa de Noruega y Ari Behn aprovecharon el buen tiempo reinante para broncearse en la cubierta de su barco. La hermana de [Haakon de Noruega] optó por una camiseta de tirantes y pantalón pirata para la ocasión, mientras que su marido, algo más atrevido, optó por dejar al descubierto su pecho y quedarse con tan sólo unos pantalones cortos. La prensa local balear asegura que el marido de la Princesa luce un llamativo tatuaje en el brazo, que pudo verse ayer cuando se quitó su camiseta.

La hija de los soberanos noruegos se ha confesado en varias ocasiones una gran aficionada a la vela, aunque de momento no practica dicho deporte. No obstante, atraída por la maravillas que su padre contaba de la isla balear, Marta Luisa ha querido aprovechar la cita náutica para conocer la isla balear y disfrutar de sus playas y sol junto a algunos amigos, que acompañan a la pareja.

Haakon y Mette-Marit optan por el mar Egeo para sus vacaciones
Algo más lejos pero también en barco, más concretamente, en el mar Egeo, [disfruta estos días de sus vacaciones estivales] su hermano [Haakon de Noruega] y su mujer, [Mette-Marit].

Primera visita del matrimonio a España
Esta es la primera visita de la princesa Marta Luisa y su marido, ya como un matrimonio, a España. Ésta se produce tras disfrutar de una [romántica y discreta luna de miel] de cinco semanas en las que permanecieron ‘desaparecidos’ del mundo. Poco después los [recién casados] regresaron a Copenhague para asistir al entierro del padrino de la princesa, Fleming Rosenborg, y semanas después asistir junto a otros miembros de las Casas Reales europeas a la [fiesta1] de [cumpleaños de Victoria de Suecia].