Aprender inglés puede ser divertido y un plan que hacer en familia. Al menos, si lo haces como te proponemos en este artículo: encendiendo la televisión. Sí, las series y los documentales pueden ser una herramienta estupenda para perfeccionar vuestra gramática, aumentar vuestro vocabulario y mejorar la pronunciación, no solo del inglés, sino de cualquier lengua extranjera. Sin embargo, nosotros nos centramos en el idioma anglosajón y en los más pequeños, porque también son estupendos para iniciarse en él. Requieren poco esfuerzo y, con la ayuda de unos subtítulos, no tiene por qué ser muy difícil de seguir. Los mejores productos audiovisuales a nivel didáctico, sin duda, son los documentales; abarcan una gran cantidad de temáticas -historia, arte, naturaleza-. Pero, en el caso de los más pequeños, las series con capítulos más cortos, son la mejor elección.
Manualidades sencillas con hojas secas para los más pequeños
Beneficios de los documentales y series infantiles para aprender inglés
- Aprenderán sin aburrirse, sin largas horas delante de libros de texto. Es un tres en uno: vocabulario, gramática y listening, con una temática que, además, podéis elegir. Buscad contenido que os guste.
- Escucharéis todo tipo de acentos, pues cada serie de televisión o documental está grabado en un país diferente, con unos personajes que pueden ser también de puntos del mundo distintos.
- Mucho vocabulario que puede ser especializado en una materia concreta (en el caso de los documentales) o mucho más amplio. En el caso de las series infantiles, suele ser bastante práctico.
- Mejorarán su pronunciación, ya que siguiendo los subtítulos, podréis ver cómo se pronuncian la mayoría de las palabras. Por ello, es recomendable poner los subtítulos también en inglés.