Aunque la primavera es la temporada de las flores por excelencia, el verano es el mejor momento para pasar tiempo al aire libre y organizar largas fiestas en el jardín. Con tus hijos, en familia o invitando a un pequeño grupo de amigos y disfrutar del buen tiempo. En el caso de que tengas niños, seguramente estés dándole vueltas en qué puedes hacer para que se mantengan entretenidos sin la necesidad de acudir a un medio tecnológico. Puedes organizar una divertida ‘gymkhana’, pero también un taller de manualidades, si no tienes tanto espacio. Hay cientos de ideas y, desde HOLA.COM, ya te hemos contado alguna, pero esta vez lo que te vamos a proponer es que organices un taller para confeccionar una diadema de flores.

Puedes pedirles que elijan las flores del jardín que más les gusten, comprarlas artificiales o recolectarlas tú el día antes en el campo. Así, tendrán todo lo necesario preparado sobre la mesa del taller y, con unos cuantos materiales más y un poco de ayuda, pasarán un rato muy divertido y creativo. No te preocupes, el paso a paso que vamos a enseñarte es bastante sencillo. ¡Ah! Y no necesitas llenar tu casa de invitados, es una manualidad estupenda para cualquier tarde con tus hijos en casa, para que tengan el complemento perfecto cuando salgan a la calle cualquier tarde del verano.

Materiales que necesitamos

• Una diadema de plástico, porque son las más sencillas de manipular y más cómodas para llevar. Además, las puedes encontrar en cualquier tienda o mercería. Si prefieres que tu corona de la vuelta a tu cabeza, una diadema no te servirá. En su lugar, elige alambre.
• Una cinta de tu color favorito no demasiado gruesa. La que más nos gusta es la cinta de raso de apenas 1 cm. Si la consigues de menor grosor, mejor.
• Unas tijeras.
• Pegamento, cola para pegar o alambre fino.
• Flores a tu elección. Nuestra recomendación es, que si es tu primera diadema, las busques de un tamaño medio, ni demasiado pequeñas, porque te será más complicado cubrir la diadema, ni muy grandes, porque son más difíciles de acoplar. Y pueden ser naturales o artificiales.

Paso a paso para confeccionar tu propia diadema de flores

Aunque te parezca algo muy complicado, en realidad, hacer una diadema de flores más o menos decente es bastante fácil. Y para los más pequeños, también. Al principio, necesitará que le enseñes cómo hacerla, pero luego, querrán seguir solos ¡y repetir!

Paso 1: elegir la base de tu diadema

Lo primero que tienes que hacer, antes incluso de hacerte con el material, es elegir el tipo de diadema que quieres. O bien una clásica, de las que se colocan sobre la cabeza y se ajustan detrás de las orejas, o bien una que cubra toda la cabeza, en formato corona. Para la primera, compras la diadema ya preparada. Para la segunda, coge el alambre y mide bien el perímetro de la cabeza de tus hijos o de los niños que vayan a participar en el taller. Recorta esa medida y une sus extremos entre sí enrollando sus puntas.

Paso 2: cubrir tu diadema con el lazo

Para que no se vea el plástico de la diadema, lo mejor es utilizar un lazo de raso para cubrirla. ¿Cómo? Enrollando con cuidado y poco a poco, cubriendo toda la superficie, dando vueltas alrededor de toda la diadema. Hay que estirar bien el lazo, para que no se queden huecos o se formen arrugas.

Al final, para fijarlo, podéis utilizar una gota de pegamento. En el caso de que hayas elegido el alambre para rodear toda tu cabeza, puedes cubrirlo también, pero esta opción permite dejarle desnudo, sobre todo, si el alambre es de color verde. Comienza con este proceso tú y muéstrale a tus hijos cómo ir avanzando.

Paso 3: preparar las flores en ramitos

Podemos elegir flores naturales o artificiales. Aprovechando el verano, nosotros te recomendamos las primeras. Y no hace falta que sean todas iguales, ni del mismo tamaño. Elegirlas en el campo o en tu jardín puede ser una actividad previa estupenda para pasar un rato divertido con los niños.

Lo que sí debes hacer, en todas ellas, es preparar sus tallos para después hacer ramitos. Para ello, recortad con las tijeras todos los tallos de una medida similar. Intentad que no sean demasiado cortos, para que podáis engancharlos bien a la diadema, sobre todo, si tu corona es de alambre. Cuando tengáis todas las flores preparadas, haced pequeños ramitos buscando formas variadas, uniendo los tallos con un poco de alambre, dándole vueltas alrededor de los tallitos y dejando unos 5 cm de alambre al final para después poder unirlas a la diadema. Es un paso sencillo que los niños pueden hacer por sí solos.

Paso 4: colocar y fijar las flores

Cuando ya tenéis todos los ramos perfectamente terminados, ha llegado la hora de engancharlos a la diadema. Podéis hacerlo con alambre y, después, fijarlas con un poco de pegamento o, directamente, con el propio pegamento. Vamos colocando un ramito al lado del otro, cubriendo la superficie de la diadema o dejando algún que otro hueco. En definitiva, de la manera que más nos guste. Se trata de dar rienda suelta a vuestra creatividad. Por último, déjalo secar y ya tendréis vuestra diadema de flores lista para llevar.