"Decidimos casarnos en la Catedral de Jerez que es espectacular y celebrarlo a escasos pasos de esta, en González Byass. Yo, aunque nací en California, me considero jerezana, ya que viví ahí hasta los 10 años y no veía mi boda en otro lugar que no fuera Jerez. Fernando, en cambio, es madrileño y tenia muy poca relación con esta ciudad, pero una vez fue a ver las localizaciones y valorar algunas en Madrid, no tuvo duda, el lugar era este la luz y el olor a vino le cautivaron. Nos apetecía una boda urbana pero que no tuviera la frialdad de un hotel, por lo que González Byass era el lugar idóneo, puesto que esta en el centro de la ciudad, pero con todo el encanto de los espacios históricos que tiene".
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