Cómo decorar las mesas en vuestra boda y lograr que todos los invitados quieran hacerles fotos
Desde incluir manteles especiales a jugar con velas
En los últimos años la decoración ha ganado peso en el mundo nupcial. Los novios quieren que los invitados no solo disfruten de una buena celebración y que se lo pasen fenomenal, también que se sientan cómodos y estén en un entorno que sea lo más bonito posible. Muchos de ellos apuestan por incluir rincones especiales, adornados para la ocasión, pero la mayoría se centra en las mesas, un espacio en el que los comensales pasarán cerca de dos horas. Las opciones para que queden perfectas son variadas: desde incluir manteles especiales a jugar con lámparas o velas. Pero si hay un elemento que nunca falta, son las flores.
Centros de flores
Si hay algo que no suele faltar en la decoración de las mesas en una boda son las flores. Aunque en este sentido las opciones son casi infinitas –entran en juego factores como el tamaño, los colores, la forma, etc.– muchas parejas prefieren composiciones sencillas que guarden una cierta relación con el ramo de la novia, la decoración de la iglesia y otros elementos florales. En ese sentido, lo más adecuado es seguir una misma gama cromática y optar por plantas fáciles de combinar entre sí. ¿Qué más es necesario para que el resultado sea perfecto? En realidad, poco. Algo que queda más que claro en este ejemplo, la mesa de Ruth, una de nuestras novias virales, que optó por un sencillo centro de flores pequeñas colocado en un recipiente de lo más especial.
Centros de flores
Una de las ventajas de los centros de flores es que no es necesario que sean de un tamaño demasiado grande para funcionar bien en todo tipo de mesas –desde alargadas a redondas–. Los expertos aconsejan que, en estos casos, se apueste por flores con un olor que no resulte demasiado persistente, para que no interfiera en los sabores y los invitados puedan disfrutar en todo momento de su comida o cena. ¿Algo más a tener en cuenta? Sí, como proponen en esta imagen las expertas de Weddings with love, las tonalidades del centro se pueden combinar con otros elementos de la mesa como, por ejemplo, las copas.
El mantel como protagonista
Si te gusta estar al día de las últimas tendencias en decoración nupcial es posible que sepas que, en estos momentos, conviven dos tendencias contrapuestas. Cada vez son más las parejas que apuestan por eliminar el mantel de las mesas y decorarlas con un menaje bonito, flores, velas o una mezcla de las tres cosas. Pero, al mismo tiempo, son muchos los que prefieren un mantel con un estampado vistoso que se convierta en el absoluto protagonista y que funcione bien con una vajilla y una cristalería minimalista. En la imagen vemos la propuesta de las wedding planners de Miss Little Things, con un maravilloso diseños de cuadros de vichy.
El mantel como protagonista
Aunque las opciones a la hora de elegir el mantel son variadas, los diseños de colores lisos pero especiales –fresas, rosados, menta…–, los que están estampados con motivos vegetales y los de cuadros son los que más suelen convencer a las parejas. Eso sí, en estos casos es importante prestar atención al resto de elementos para que la combinación no resulte demasiado recargada. Desde Minerva Martín Eventos muestran esta bonita mesa con un diseño de color verde y blanco que funciona fenomenal con los bajoplatos de mimbre y las flores naranjas. Detalles especiales y de lo más elegantes.
La importancia de las luces
"En una boda celebrada en un exterior de noche la iluminación lo es TODO. Es capaz de transformar un lugar. Para nosotras la partida más importante de una boda de noche donde debes sorprender a tus invitados creando magia a través de la iluminación", explicaban desde Bambarela a HOLA.com. Por eso cada vez es más frecuente que elementos como lámparas de cristal o velas se cuelen en la decoración de las mesas. Un buen ejemplo lo encontramos en este montaje de The Wedding Bliss Thailand.
La importancia de las luces
Uno de los riesgos de incluir elementos luminosos en las mesas es que caer en excesos puede resultar relativamente fácil. Es importante encontrar un término medio y que las distintas lámparas, candelabros, velas, etc. guarden una cierta relación entre sí. El montaje de la imagen, un trabajo conjunto de Paolo Nassi y Jinane Kafrouny demuestra que mientras haya un buen equilibrio los resultados pueden ser maravillosos.
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Flores y más flores
La mayoría de parejas y expertos del sector no se imaginan cómo sería organizar una boda sin poder utilizar flores. Aunque hay quienes prefieren incluirlas solo en pequeños detalles, la mayoría prefiere que formen parte de su gran día. Y una de las tendencias actuales es convertirlas en las absolutas protagonistas. Este montaje de Eva, wedding planner de Bodas Colorín, con flores de Elena Suárez & Co. demuestra que se pueden utilizar en el centro de la mesa, pero también colgar del techo para dar un aspecto totalmente renovado y diferente a la celebración.
Flores y más flores
Otra opción es la que sugirió a Marta, una de nuestras novias virales, su hermana Blanca. Como buena amante de las tendencias, recomendó que los centro de mesa estuvieran inspirados en naranjas. Y que combinaron con pequeños arbolitos con los que dar un toque más silvestre al conjunto. Los meseros, ideales, fueron un trabajo de Macsand.
El poder del minimalismo
Si hay una tendencia que cada vez cobra más fuerza en el mundo nupcial es el minimalismo. Cada vez más novias apuestan por vestidos sencillos, pero muy especiales, con los que huyen de los excesos y buscan reflejar su personalidad. Esa búsqueda del less is more llega también a las mesas. Las weddings planners de Weddings with love proponen este sencillo montaje en el que logran crear un conjunto de lo más especial gracias a los toques de color que introducen en los platos, vasos, cubiertos y las flores que adornan parte del techo.
El poder del minimalismo
La sencillez también se deja ver en este montaje de Arte Boda en el que la wedding planner propone decorar la mesa con unos sencillos ramitos de flores. Lo mejor es que, al ser variados –aunque bien combinados entre sí– da una sensación de ligereza y frescura de lo más especial. También propone incluir vasos dorados para dar un toque diferente, sin sumar más color a la propuesta.