Diademas y tocados diseñados para novias con velo

Los tocados ya no son únicamente para invitadas, las novias también quieren contar con una corona, pasador, diadema u horquilla especial para el gran día. 

Las marcas experimentan con materiales diversos, que van desde los tejidos hasta las flores preservadas o los empleados en orfebrería. Un minucioso proceso artesanal repleto de detalles, que también permite la personalización.

La firma Flores en el columpio diseña piezas a medida para todas aquellas que prefieran llevar un diseño exclusivo en su boda.

Uno de sus diseños más aplaudidos entre sus clientas ha sido esta creación en tonos rosados con velo en color maquillaje a juego. Ambos complementos se combinan a la perfección sin restar un ápice de protagonismo el uno al otro.

Otra de las propuesta de la marca madrileña es este diseño que sigue la misma gama cromática que el anterior, pero en formato diadema, uno de los más cómodos que se pueden encontrar actualmente en el mercado.

Para combinarlo bastaría con colocar la pieza después del velo, pues, tal y como explica María Sánchez, directora creativa de la firma, así se evita que el peso del velo estropee el accesorio.

En esta imagen, de Natalia García Estudio, se aprecia a la perfección la recomendación de la diseñadora. El clásico velo blanco se une a una corona floral a todo color y muy favorecedora.

Se trata de una de las mezclas preferidas de las amantes de la moda y una estética muy habitual entre las cuentas de redes sociales dedicadas al mundo nupcial.

M de Paulet cuenta con un amplio catálogo de piezas muy femeninas y con tintes añejos. Los tonos dorados, plateados y metalizados y los materiales rígidos son característicos de sus propuestas que su propio equipo denomina tocados joya.

Para las amantes de los tonos blancos y los estilismos monocolor, Flores en el columpio también cuenta con una selección de diseños para un look total white, completamente combinado. En concreto este modelo, pensado para acompañar a un semirecogido o a un moño, permite tanto llevar velo como prescindir de él sin renunciar a llevar la tendencia.