En las páginas de la revista ¡HOLA! de esta semana, Bertín Osborne, su mujer, Fabiola Martínez, y sus hijos, Kike y Carlos, enseñan por primera vez la nueva residencia que tienen en la capital, donde están viviendo estas navidades. “Aquí hemos encontrado la unión familiar que antes no conseguíamos”, aseguran. Y es que a Bertín no le gustaba mucho vivir en Madrid, hasta que encontraron este nuevo hogar. “Esta casa tiene tres plantas, casi mil metros cuadrados construidos y dos mil setecientos metros de parcela. En la anterior, también en esta misma urbanización, Bertín se sentía como un león enjaulado y había tensión”, confiesa Fabiola.
Ahora el cantante, quien es todo un enamorado del campo, se siente muy a gusto en esta casa, aunque están pensando en comprar también una finca en Ciudad Real. “Estamos intentando vender el cortijo de Sevilla, aunque sabemos que la época no es la mejor. Queremos venirnos a una finca que hemos visto en Ciudad Real, a cuarenta y cinco minutos en AVE”. “En nuestra casa de Sevilla hay que atravesar dos patios para llegar al dormitorio, y ahora, Carlos entra por las mañanas en nuestra habitación, nos da un beso de buenos días y bajamos todos juntos a desayunar en pijama”, añade Bertín.
Trece páginas, acompañadas de las imágenes de la familia en su nueva casa, en las que la feliz pareja nos habla también de sus hijos. “Kike empieza a tener más equilibrio y más fuerza muscular para ponerse en pie. A nivel lenguaje ha mejorado muchísimo y cada vez dice más palabras. Su comunicación ya es más espontánea, natural”, cuenta Fabiola en esta número de la revista ¡HOLA!, que está a la venta a partir de hoy, lunes.
