Se acerca la Navidad y cada rincón del mundo se llena estos días de colores y adornos, un atractivo para los más pequeños que se preparan para vivir una de las épocas más especiales del año. Junto a las guirnaldas y los abetos decorados, Hyde Park en Londres ha instalado un auténtico parque de atracciones invernal que hizo las delicias de los que se acercaron a visitarlo. La inauguración se organizó por todo lo alto, no en vano esta apertura da el pistoletazo de salida a las fiestas. Toboganes gigantes y montañas rusas se llenaron de adictos a la adrenalina con ganas de pasar un buen rato.
Entre los que hicieron cola para probar estos “juguetes” estaban Rod Stewart y su mujer Penny Lancaster. Bien abrigados para combatir el frío de la capital inglesa, la pareja acudió a esta tradicional cita con sus dos hijos Alastair, de seis años, y Aiden, de un año y medio, que lo miraba todo con los ojos muy abiertos desde los protectores brazos de su madre. Aún son un poco pequeños para subirse a las vertiginosas montañas rusas, así que Penny decidió lanzarse con Aiden por uno de los toboganes. El bebé se agarró fuerte a su madre mientras descendían, ya que, por la carita que puso, parece que esta experiencia le dio un poquito de miedo.
La familia al completo, acompañada por otros dos niños, se lo pasó en grande. Rod hizo un paréntesis en la promoción de su nuevo trabajo, un disco navideño que incluirá los clásicos de la época con colaboraciones de lujo como Michael Bublé, Mary J. Blige, Cee-Lo Green y un dueto virtual con Ella Fitzgerald. El LP, Merry Christmas, Baby, se puso a la venta a finales de octubre y seguramente será la banda sonora de la Navidad para muchos de sus incondicionales.
