Sabía que todos los ojos estarían puestos en ella, por eso Britney Spears se preocupó mucho por estar impecable en su presentación como jurado de la versión estadounidense de Factor X. Su vestido, su pelo, sus piernas e incluso sus manos, en las que lució orgullosa su anillo de compromiso, fueron arregladas con sumo detalle.
Apuntándose a la moda de los colores flúor, la cantante eligió para su presentación un diseño en color rosa de Brian Lichtenberg, con el que le fue difícil pasar desapercibida. El vestido que se ajustaba a cada una de sus curvas dejaba al descubierto sus delgadas piernas, así como su estilizada figura.
Parece que su primera incursión como juez en el reality ha comenzado con muy buen pie, pues el productor musical y responsable del programa, Simon Cowell, ha comenzado a bromear con la cantante antes de su esperado debut.
"Acabo de llegar a las audiciones de Factor X USA, espero que todo el mundo esté listo. Todavía estoy esperando a Simon Cowell, por supuesto.... " escribía Britney en su Twitter. Como respuesta, una contestación de Simon, quien dejaba segundos después del mensaje de la cantante dejaba otro en la red social: "Llevo esperando a Britney Spears dos horas y todavía no ha llegado" bromeaba el miembro del jurado.
Junto a Britney Spears, otro nuevo fichaje, la estrella de Disney, Demi Lovato. La cantante, de 19 años, opto por un vestuario más sencillo que el de su compañera de aventura decantándose por un vestido bordado de color verde lima. Demi añadió a su vestuario un toque de elegancia luciendo un elaborado moño y unos peep toes negros.
Una vez comenzaron las audiciones, la intérprete de Womanizer y su compañera se metieron de lleno en la dinámica, tanto que Demi Lovato acabó llamando a Simon Cowell, "el abuelo".
