Espléndida a sus seis meses de embarazo, Paulina Rubio se volvió a subir a un escenario con la fuerza y la energía que la caracterizan para celebrar el Bicentenario de la Independencia en Ciudad de México. Entonando los temas más conocidos de su Causa y efecto, la chica dorada, que hizo los ensayos con unos shorts y chaqueta negros, se cambió de ropa para la gran fiesta. Su favorecedor vestido negro, con un lazo grande bicolor en el bajo, dejaba bien visible su “tripita”, que no le impidió en absoluto bailar y contagiar su buen humor a los asistentes.
Su marido Nicolás Vallejo-Nágera se sentó en primera fila para no perderse ni un detalle de la actuación de su mujer, que es una de las artistas más queridas del país azteca. Habrá que esperar algún tiempo para ver de nuevo a Paulina con el micrófono en la mano, ya que la del Bicentenario fue su última actuación por el momento. La chica dorada ha decidido echar el freno para disfrutar con tranquilidad la última fase de su embarazo y preparar todo para la llegada del bebé.
De momento se sabe que será niño, tal y como confirmó la artista en Twitter, herramienta que también ha utilizado para pedir a sus seguidores que le den sugerencias sobre el nombre. ¿Elegirán finalmente Nicolás como su padre? ¿Cuál le propondía usted?
