Geri Halliwell, una chica dorada y sin anillo de compromiso, de estreno en Londres

La cantante asistió en solitario a la premiere de The Boat That Rocked

Por hola.com

Anoche tuvo lugar en Londres el estreno mundial de la película The Boat That Rocked, en Leicester Square, y entre todos los invitados que asistieron una brilló por encima de todos: la cantante Geri Halliwell, quien ha vuelto de nuevo a la soltería.

Hace tan sólo un par de semanas, un diario británico aseguraba que la Spice Girl había roto su compromiso con el empresario italiano Fabrizio Politi, con quien llevaba saliendo un par de meses y se comprometió a finales de enero, aunque no anunciaron la fecha de la boda. Según este rotativo, Geri se echo atrás, ya que se dio cuenta de que no estaba hecha para el matrimonio. Lo suyo fue una relación breve pero intensa, ya que en el poco tiempo que estuvieron juntos, además de hacer viajes de ensueño, - estuvieron en Maldivas y París -, ya conocían a sus respectivas familias y era habitual verles con la hija de la cantante, Bluebell Madonna, con quien el italiano parecía llevarse muy bien.

Geri apareció anoche en solitario en el estreno de esta nueva película del director de Love Actually sin el espectacular anillo de compromiso que le regaló Fabrizio, con un mini vestido de color dorado con un atrevido escote y unos tacones de vértigo, convirtiéndose en el centro de atención. Ni ella ni su pareja han querido hablar de la ruptura, pero lo que sí parece es tener muy claro lo que quiere para ella y para su hija y comienza una nueva etapa de su vida con muchas ganas. En las últimas semanas se la ha visto saliendo por las noches en compañía de varios amigos y desde que salió a la luz la noticia de su ruptura no se la ha vuelto a ver con el italiano.

Quien sigue disfrutando de su estabilidad sentimental es Paul McCartney que acudió al estreno con su inseparable novia, la multimillonaria Nancy Shewell, con quien lleva más de un año y parece estar muy feliz. El punto de humor de la noche sin duda vino de la mano del actor Rhys Ifans, uno de los protagonistas de la película, que durante su paseo por la alfombra roja no paró de bromear con un grupo de chicas vestidas con ropa de los años sesenta.