Shaila Dúrcal: 'La demanda no es algo que me incumba a mí. Yo apoyo a mi padre y mis hermanos'

La hija pequeña de Junior habla por primera vez de la demanda que sus hermanos mayores han interpuesto contra su padre por el reparto de la herencia de su madre Rocío Dúrcal

Por hola.com

El único que había hablado del tema hasta ahora es Junior, que se ha confesado dolido por la demanda que le han puesto sus hijos mayores en relación al reparto de la herencia de su madre. No se conoce de momento la versión de Carmen y Antonio Morales, que se mantienen en silencio sobre un tema que sí ha comentado sin embargo la menor de la familia, Shaila. La cantante está en El Salvador, donde participará en la gala benéfica Teletón, y allí comentó lo que opina de esta delicada situación y cuál es su papel en la disputa.

"Es algo entre mis hermanos y mi padre, pero lo resolverán porque todo tiene solución en esta vida" aseguró Shaila. Se mostró cauta en cuanto a su participación en el tema, asegurando que se mantiene neutral. "No me voy a meter en eso, es un problema de ellos. Yo respeto a mis hermanos y mi padre y eso es lo más importante para mí". Rotunda, contestó a la pregunta de por qué no se había unido a la demanda: "No he demandado porque no". Tampoco quiso posicionarse de un lado u otro reiterando que ella apoya a todos por igual. "Yo estoy del lado de mi familia, les quiero mucho y les apoyo a todos. La demanda no es algo que me incumba a mí". Añadió que hablaba con todos y que de momento ninguno le había pedido nada: "Mi padre no me ha pedido nada, ni mis hermanos".

La semana pasada en la revista ¡HOLA! Junior aseguraba que se estaba enfrentando a una situación complicada: "Lo que está pasando es una debacle. Jamás me hubiera podido imaginar que mis hijos fueran a demandarme. Mi pregunta es: ¿qué les he hecho yo a mis hijos para merecer esto? ¿En qué momento han dejado de quererme?". El problema surgió del reparto de la herencia de Rocío Dúrcal, estipulado en un testamento que redactó catorce años antes de su muerte, en 1992. En él legaba a su marido el tercio de libre disposición de la herencia, además de la cuota legal usufructuaria de la misma (el total de ambos serían 900.000 euros). En lo que correspondía al remanente de sus bienes, créditos, acciones, etc. instituyó como herederos universales a sus hijos. Sin embargo los principales problemas surgirían cuando los hijos de Junior conocen la existencia de otras propiedades que no fueron incluidas en el testamento ni tampoco en la escritura de repartición hereditaria.