Sean Preston y Jayden James, los dos pequeños 'culpables' de la felicidad de su mamá, Britney Spears

La cantante lució este fin de semana un collar con los nombres de sus hijos durante una divertida jornada de compras por Los Angeles

Por hola.com

La felicidad y el equilibrio parecen reinar de nuevo en la vida de Britney Spears. Después de varios enfrentamientos judiciales con su ex marido y padre de sus hijos, Kevin Federline, ambos llegaron el mes pasado a un acuerdo sobre la custodia de los pequeños Sean Preston, de dos años y Jayden James, de 19 meses. Esto ha hecho posible que sea mayor el contacto entre la cantante y sus hijos lo que, a buen seguro, es la causa de su radiante sonrisa. Britney ha disfrutado de unos tranquilos y familiares momentos en Malibú.

Ha estado muy pendiente de sus hijos y los ha atendido personalmente en constantemente. La artista tuvo que repartir sus mimos y atenciones entre Sean Preston y Jayden James, a quienes no dudó en coger en brazos en algún momento debido a su corta edad. Britney se muestra exultante en su papel preferido, el de madre, y luce un aspecto mucho más saludable que en las épocas más turbulentas de su vida. Afronta el futuro con optimismo y actualmente está centrada en la grabación de su nuevo álbum, para el que aún no hay prevista ninguna fecha de lanzamiento.

Cerca de su corazón
A raíz del acuerdo al que llegó con su ex marido, Britney podrá ver a sus hijos dos días y una noche a la semana, ya que los pequeños seguirán viviendo por el momento con su padre. No obstante, las medidas adoptadas contemplan la posibilidad de que el número de visitas de la madre pudieran ampliarse con el tiempo.

Pero hasta ese momento, Britney Spears ha descubierto una buena forma de sentirse cerca de Sean Preston y Jayden James: este fin de semana lucía orgullosa un collar con el nombre de ambos. En esta nueva etapa de su vida no sólo se la ve relajada y contenta junto a sus hijos, sino que es evidente su interés por volver a convertirse en una de las mujeres más atractivas del planeta. Con ese objetivo salió de compras por las calles de Los Angeles y visitó algunas de las tiendas más exclusivas de la ciudad.