Completamente enamorada de su marido e incluso pensando en tener hijos. Así se confesó Mariah Carey en la primera entrevista que ha concedido en televisión después de su boda sorpresa con Nick Cannon en el Caribe. En el programa de Ellen DeGeneres, la diva explicó que tienen planeado renovar sus votos cada año para celebrar su aniversario, una idea que se le ocurrió a su marido. "No digas nada a nadie, pero el año que viene habrá otra boda" aseguró. Ha sido estar junto a él lo que le ha despertado un instinto maternal que hasta el momento no había sentido. "Yo nunca pensaba en eso porque mis padres se separaron y no tenía referencia de una familia" explicó.
Sin dejar de sonreír, recordó la sencilla e íntima ceremonia en la que dio el "sí quiero" y desveló algunos detalles del entorno y el menú. "Unas amigas mías me ayudaron con el vestido y el pelo. Acudieron tan sólo una docena de personas y mi pastor, Clarence Keaton, viajó desde Nueva York" comenzó. El rito se celebró en la playa al atardecer y después de jurarse amor eterno comieron langosta y brindaron con champán Dom Perignon. Ella llevaba un vestido diseñado por Nile Cmylo, en un color rosa pálido que iba en degradé al blanco opaco. "La boda fue muy hermosa y dulce. Estar allí con nuestros seres queridos bajo el cielo fue un momento espiritual" concluyó.
Desde que se casaron, Mariah Carey y Nick Cannon no se separan. Fiestas, cenas, entregas de premios… la pareja se ha dejado ver en múltiples ocasiones disfrutando de la noche neoyorquina. Se conocieron en el set de rodaje del segundo videoclip de la artista Bye bye, uno de los temas que se incluyen en su nuevo disco E=MC2. Nick protagonizaba cariñosas escenas con la artista que ahora, visto lo ocurrido, son premonitorias de un amor que fue a primera vista.
