Lo había dicho ya el diseñador Roberto Cavalli, el rapero P. Diddy e incluso los cambios en su cuerpo lo habían revelado en un lenguaje silencioso. Los únicos que hasta el momento no habían dicho una palabra sobre el embarazo eran los futuros padres, Jennifer López y Marc Anthony. Sin embargo, la artista decidió sorprender a su público, y también a su propio marido, en el último concierto de su tour conjunto por Estados Unidos. Ante un American Airlines Arena de Miami a rebosar de fans, Jennifer pronunció las palabras más esperadas por todos desde hace semanas. "Marc y yo estamos esperando" dijo, con la emocionada sonrisa de quien está a punto de cumplir uno de los mayores sueños de su vida. Marc añadió: "No sabía que iba a hablar".
Los aplausos resonaron por el recinto aunque no lograron arrancar ningún detalle más sobre la estupenda noticia, que al fin y al cabo ya todos sabían. La prensa continúa especulando con la posibilidad de que la pareja esté esperando gemelos. Ya no habrá más oportunidades de seguir observando la evolución del estado de buena esperanza de Jennifer, puesto que se ha cancelado la última cita que estaba fijada para el sábado 10 de noviembre en San Diego. El matrimonio culmina así su primer tour conjunto, que ha sido además el debut en directo de Jennifer, con un enorme éxito. A este triunfo se unió el estreno de El cantante, película en la que actúan juntos, y el lanzamiento del nuevo disco en inglés de López, Brave.
Las cosas no pueden irles mejor en el trabajo y en el amor. Los primeros rumores sobre el embarazo de la artista surgieron precisamente al principio de la gira al apreciarse el cambio radical de estilo en su forma de vestir. Los modelos de los conciertos eran todos vestidos sueltos, que el diseñador Roberto Cavalli creó especialmente para disimular el abultado abdomen que asomaba en ocasiones bajo ellos. Fue el mismo Cavalli el que desveló el secreto que escondían esos metros de tela, un rumor que la cantante no ha podido mantener por más tiempo.
