Desde que comenzara su gira de conciertos por Norteamérica junto a su marido Marc Anthony no han cesado los comentarios y no es para menos, ya que la imagen de la artista ha dado un giro de ciento ochenta grados en las últimas semanas. Jennifer López ha cambiado los trajes ajustados y las coreografías movidas por vestidos de corte imperio y bailes más pausados, lo que ha desatado las especulaciones acerca de un posible embarazo. Precisamente en el recital ofrecido en el Casino Moneghan Sun, de Connecticut, el viento levantó la blusa de la artista dejando entrever una silueta más redondeada. El gesto de la intérprete de Qué hiciste acariciando su tripa durante una canción, algo típico en las mujeres embarazadas, ha sido utilizado también como argumento para estas informaciones.
Los medios van más allá y aseguran que ya está de cuatro meses y espera gemelos, unos rumores que, según varias fuentes citadas en la publicación US Weekly, habría confirmado su propia madre, encantada con la noticia. Sin embargo y pese a estar en plena promoción de su nuevo álbum en inglés, Brave, lo que implica numerosas entrevistas, de boca de Jennifer no ha salido una palabra que apunte a la veracidad de todo lo dicho. El matrimonio continúa desplegando su química sobre los escenarios de medio país, mientras ella, sin dar detalles, asegura con una amplia sonrisa que vive uno de los momentos más felices de su vida.
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