‘Por supuesto que sí’ -dice- ‘pero eso no va a suceder porque acabamos de firmar una prórroga de otros cuatro años. Todas las cosas que nos pasan cada día es como una nueva sorpresa". Tanto las novias de David, Sebastien y Urs como la mujer de Carlos, la cantante Geraldine Larrosa, con quien se casó el pasado junio en Disneylandia en una boda como sacada del cuento de la Cenicienta, pertenecen al mundo musical así que entienden el estilo de vida que llevan siempre lejos de casa de un lado para otro.
Amor en la distancia
David, que se ve así mismo el clásico chico medio que desea hacer a todo el mundo feliz". Comparte con su novia su pasión por los deportes como el snowboard, el paracaidismo y el ciclismo. "Uno de nuestros sueños es atravesar Estados Unidos en bicicleta, pero es un proyecto a largo plazo. En este momento, el trabajo ocupa todo nuestro tiempo". Y todas les acompañan cuando sus respectivas obligaciones se lo permiten."Mi novia disfruta de mi éxito y en cierta manera le gusta este estilo de vida" dice Urs, a quien le gusta "tocar la guitarra, las motos y la gimnasia"; Sebastián añade: "Mi novia lo entiende porque pertenece a este negocio. Cuando puede me acompaña. Ellas están muy orgullosas del trabajo que hacemos pero es muy importante que se sacrifiquen por nosotros". "Geraldine y yo llevamos juntos doce años, y el balance de casados es estupendo. Nos vemos a lo mejor cinco días o una semana al mes, y luego ella viaja conmigo cuando puede".
Mientras termina la entrevista, Sebastien, un loco de Internet, el tenis y surfing, nos comenta que la parte negativa de todo esto es "no ver más a mi familia y a mis amigos en Francia" aunque también reconoce que un día perfecto para él es "estar en el escenario y cantar". Todos coinciden en que el momento más especial de estos dos años y medio juntos fue cuando supieron, en mitad de un concierto, que habían llegado al número uno en Estados Unidos.
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