Rocío Dúrcal: la vida jalonada de éxitos de una 'dama de la canción'

Por hola.com

Rocío Dúrcal se marcha dejando tras de sí una de las más brillantes carreras artísticas. Cuarenta años trabajando, más de 42 millones de discos vendidos en el mundo entero y casi una veintena de películas la convirtieron, sin duda, en una de las grandes voces del espectáculo en España y fuera de nuestras fronteras. Venezuela, Puerto Rico y, muy en especial, México, disfrutaron de sus inolvidables interpretaciones de canciones típicas del país latinoamericano que le hicieron acreedora del título de "dama de la canción mexicana". Su amplio repertorio, desde el pasodoble a la ranchera, su inconfundible voz y su dilatada carrera, con multitud de colaboraciones desde su propio marido "Junior" a Alejandro Sanz pasando por Roberto Carlos, Serrat, Luis Miguel o Ricky Martin hacen de Rocío Dúrcal una figura singular e irrepetible, y quien con su muerte, deja un gran vacío en el mundo de la canción y en el de todos los que la conocieron y admiraron.

Su abuelo, su primer fan
El camino recorrido por Rocío desde que naciera en el seno de una familia humilde del madrileño barrio de Cuatro Caminos hasta el mencionado reconocimiento internacional está jalonado de brillantes comienzos, éxitos, reinvenciones de sí misma y trabajo duro. Rocío mismo narraba en las páginas de ¡HOLA! como de niña su abuelo fue su primer admirador haciéndola bailar y cantar delante de sus amigos en el bar del barrio donde jugaba su partida de cartas. Fue su abuelo quien un día, casi a escondidas, la llevó a un programa de radio para descubrir nuevos talentos. Con sólo quince años tuvo su primera oportunidad en televisión y allí la descubrió Luís Sanz, quien se convertiría en su representante y mentor durante mucho tiempo.

Carrera en el cine y la canción
Comenzaba una carrera fulminante en la que no tardaría en llegar el cine. Los productores vieron en Marieta, ya convertida en Rocío Dúrcal, apellido artístico que la propia Rocío eligió al azar en un mapa de España, una cara joven, fotogénica y con una gran voz. Rodó su primera película a los 16 años, Canción de juventud, cobrando la asombrosa cifra entonces de 75.000 pesetas (unos 450 euros). Su rostro fue uno de los más populares de los años sesenta y setenta llegando a protagonizar casi una veintena de películas.

Paralelamente, Rocío Dúrcal también iniciaba entonces su carrera musical. De hecho, su primer disco lo grabó en 1962 con las canciones de la película Canción de juventud. Un año más tarde, siendo ya una estrella adolescente en España, Rocío viaja por primera vez a México donde entra en contacto con las rancheras y con el compositor Juan Gabriel, que con el tiempo le proporcionaría tantos éxitos y que le produjo una decena de discos.