En vísperas de su unión con David Furnish tras doce años de relación, Elton John organizó una espectacular fiesta prenupcial en el selecto club Too 2 Much del Soho londinense, a la que asistieron, entre otros invitados, el diseñador Alexander McQueen, los cantantes Bryan Adams y Gary Barlow, el actor Sir Ian McKellen (el mago Gandalf de El señor de los Anillos), Liz Hurley y su novio, Arun Nayar, Orlando Bloom y la actriz británica Cilla Black. Treinta camareros disfrazados de legionarios y cow boys atendieron a los asistentes que bebieron champagne y comieron sushi.
Durante toda la noche tuvieron lugar curiosas actuaciones musicales a cargo de los amigos de Elton John. Para abrir boca, Neil Tennant (Pet Shop Boys) y Jake Shears (Scissor Sisters) interpretaron el clásico de Gloria Gaynor I am what I a y a continuación Mark Owen, Gary Barlow y Howard Donald cantaron el éxito de Take That Relight my fire.
Bryan Adams también tocó un par de canciones. La gran sorpresa de la velada fue el video mensaje de un minuto de Bill Clinton felicitando a la pareja que se emitió durante la reunión. Doscientos mil dólares dicen que se gastó el artista en esta fiesta previa a su enlace, que tendrá lugar el 21 de diciembre, fecha en la que las uniones homosexuales comienzan a ser reconocidas por ley en Inglaterra y Gales (desde el lunes 19 de diciembre lo son en Irlanda y en Escocia desde el martes 20). Adelantamos algunos de los detalles.
La ceremonia tendrá lugar en el Windsor Guildhall, el mismo lugar en el que Carlos de Inglaterra contrajo matrimonio con Camilla Parker Bowles el pasado abril, y será oficiada por Clair Williams, la funcionaria que casó al Príncipe de Gales.
La fiesta posterior será en la mansión que el cantante posee en la campiña, Elton Towers, valorada en diez millones de euros, precisamente donde conoció a David Furnish en 1993 en la fiesta de Halloween que organizó. Elton John ha encargado todos los detalles al mismo organizador que planifico la fastuosa boda de Victoria y David Beckham, que por supuesto forman parte de la lista de invitados.
La pareja intercambiará sus alianzas, de la firma Chopard con un diamante amarillo de 31 quilates cada una, ante la sola presencia de la madre y el padrastro del cantante y los padres de Furnish, pero luego echarán la casa por la ventana para festejar por todo lo alto la unión con setecientos invitados, entre los que al parecer estarán Donatella Versace, Sting, Madonna, Rod Stewart, Mick Jagger, Naomi Campbell, Ian McKellen, Bryan Adams, Liz Hurley (recordemos que Elton John es padrino de su hijo Damien Charles), Salma Hayek y Penélope Cruz, que rueda actualmente en Gran Bretaña a las órdenes de Jake Paltrow, hermano de la conocida protagonista de Shakespeare enamorado. De Estados Unidos se espera la llegada de Pamela Anderson y Liz Taylor. No se sabe si acudirán George Michael y su compañero Kenny Goss (que también han anunciado su boda). No faltará tampoco el cocker spaniel de la pareja, Arthur.
La prensa británica apunta que Victoria Beckham actuará bien como testigo de Elton John o bien como dama de honor, en este último caso junto a otros nombres como los de Liz Hurley, Penélope Cruz y Salma Hayek.
Elton John ha invitado también al Primer Ministro británico, Tony Blair, y a su esposa Cherie, aunque por el momento no se ha confirmado si asistirá.
Aproximadamente un millón y medio de euros es lo que ha gastado Elton John para agasajar a sus invitados. Habrá ríos de champagne que regará un menú que incluye cordero asado y pastel de chocolate. Sobre la tarta nupcial, el lugar de la tradicional pareja de novios, habrá dos action man (versión masculina de la Barbie) decorados con cristales de Swarovski.
Cuando le advirtieron sobre los posibles problemas de seguridad que se pueden presentar el próximo miércoles, en plena fiesta de boda, el músico decidió contratar por 20 mil dólares a una minifuerza policial exclusiva para el evento.
El cantante ha rechazado la millonaria oferta de casi 9 millones euros que le ofrecía una cadena estadounidense por la exclusiva del enlace. Su unión será un evento de las ‘mil y una noches’, pero no desea que se convierta en un negocio.
Siguiendo esta tónica, la pareja ha pedido que no se les haga regalos personales, sino donaciones a su fundación contra el Sida.
¿La luna de miel? Según algunos será un crucero en St. Barts, la paradisíaca isla donde la pareja suele pasar cada fin de año.
