"Hoy cumplo 12 años", comentó con una pícara sonrisa. La cantante Mariah Carey bromeó así con los periodistas antes de entrar en el exclusivo club londinense Tantra, donde celebraba su 35 cumpleaños. La diva del pop está en Londres promocionando su último trabajo discográfico, el décimo disco que saca al mercado. Este era el principal motivo por el que, según ella, se organizaba la fiesta. "Yo no cumplo años y esta fiesta es por el lanzamiento de The emancipation of Mimi. Es un día muy feliz para mi, estoy muy contenta", continuó. La neoyorkina explicó que este album "salía en un buen momento". "Es la primera vez que tengo una gran experiencia grabando", puntualizó.
Un millón de libras en diamantes La intérprete de temas como Dreamlover y Hero eligió para la ocasión un espectacular vestido blanco, que dejaba los hombros al descubierto, de Roberto Cavalli con aplicaciones de diamantes por valor de un millón de libras, y una estola de piel. Un atuendo especial para una noche en la que la nota dulce la puso la impresionante tarta de cumpleaños, que reproducía una imagen de la artista en chocolate y que costó cerca de 5.000 libras. Entre los invitados de Mariah estaban Lee Ryan y Simon Jebe, la cantante de Mis-Teeq, Aleesha Dixon, y Jimmy Floyd Hasselbaink.
Dos premios Grammy, ocho American Music Awards, además de un premio Billboard, en 1999, y un World Music Award consagraron a Mariah Carey en los años 90, aunque se ha mantenido alejada de los escenarios en los últimos años. Con su último trabajo, más personal que los anteriores, la cantante intenta recuperar su lugar en la cima del universo musical.
