Natalia, la popular cantante de la primera edición de Operación Triunfo, ha regresado hace unos días a España tras haber grabado su nuevo disco, Besa mi piel en Estocolmo. Nacida hace veinte años en Sanlúcar de Barrameda, Natalia fue la concursante más joven en entrar en la Academia, de la que guarda un recuerdo imborrable. Dicen en su familia que nació cantando y que de niña ya anunciaba que quería ser artista. Natalia siente pasión por la Naturaleza y es una defensora de los animales. Tanto es así, que en su casa llegó a convivir con cuatro perros, un loro, un caballo y hasta un caimán. La joven cantante ha posado por diversos rincones de su Sanlúcar natal, al tiempo que ha hablado con sinceridad sobre su vida y sus inquietudes.
—Natalia, un nuevo disco en la calle. —Sí, se llama Besa mi piel. Aunque no ha perdido el hilo de mi primer trabajo, este es bastante distinto, porque se ve a una Natalia más madura musicalmente hablando. Hay baladas, rock, rap, etcétera. Quería también aparecer un poco más mujer y menos niña. —Te ha pasado mucho en muy poco tiempo. —Sí, y todavía no soy consciente de ello. —¿Cuál ha sido el mayor triunfo de tu vida? —Entrar en Operación Triunfo, conocer a mis maravillosos compañeros y haber podido grabar un disco. La Academia me abrió muchas puertas. He visto cumplido mi sueño. —Entre esos compañeros estaba Naim. Se habló mucho de vosotros. —Nunca hubo relación formal alguna, pero entre nosotros queda algo muy bonito. De hecho él vive en Madrid y yo en Barcelona y somos muy amigos, muchísimo. —¿Triunfadora en el amor? —Ya te he dicho que soy muy joven y que todavía tengo tiempo. —¿Tienes novio ahora? —No. Para tener un novio o una pareja tengo que dedicarle tiempo, lo mismo que me gusta que me lo dediquen a mí. —¿Con qué compañero de la Academia has contactado mejor aparte de con Naim? —Con Chenoa. Anteayer estuve cenando en su nueva casa de Barcelona. Ella está muy bien, muy bien. Allí estuvimos Alejandro, Chenoa y yo. —¿Alejandro? —Sí, Alejandro Parreño, otro compañero de «Operación Triunfo ». Si de algo estoy contenta es de tener muy buena relación con mis compañeros. —¿Dónde coincidís Chenoa y tú? —En que las dos tenemos mucho carácter y las dos decimos lo que pensamos en ese momento. Chenoa dice que cuando yo sea mayor seré como ella. Chenoa siempre tuvo conmigo una especie de instinto maternal, porque yo era la pequeña y ella la mayor. Me ha protegido muchísimo. También coincidimos en la manera de vestir. —¿Crees que ella y David Bisbal se casarán algún día? —¡Yo qué sé! ¡Ojalá se casen!
