Lograr que una artista de la talla de Jennifer López acuda a una fiesta privada puede ser complicado aparte de muy costoso. La cantante hispana aparecera en una fiesta siempre y cuando la persona que quiere contar con su presencia este dispuesto a pagar casi 150 millones de pesetas por hora, sin contar gastos extraordinarios.
Así lo ha comunicado la agencia que contrata sus apariciones públicas en los diversos eventos para el próximo año. La actriz es una de las estrellas más cotizadas del momento, después de colocarse su último álbum J. Lo en el primer lugar de las listas de éxitos y conseguir que su última película The Wedding Planner recaude ya miles de millones de pesetas durante las primeras semanas en la cartelera estadounidense. Jennifer López no es la única que quiere adornar cualquier fiesta, también lo hacen el grupo musical Backstreet Boys o N’Sync que ya cobran tarifas superiores a los 180 millones de pesetas.
Ni hablar de Puff Daddy La cantante latina aseguró en Hong Kong, durante su gira de promoción de su último disco, que se niega a hablar de la ruptura con el rapero Puff Daddy, al igual que no quiso comentar nada sobre el bailarín de su grupo con el que se le ha estado relacionando últimamente. Jennifer López fue fotografiada con el bailarín de su grupo Cris Judd la pasada Nochevieja en la casa de la actriz. Todo ello parece indicar que las imágenes fueron las causantes de la ruptura entre ella y el cantante Puff Daddy. Esa noche, a la cantante latina se la vio feliz con Cris, incluso le llegó a besar de un modo romántico, como si fuera su novio de toda la vida. La actriz de origen puertorriqueño reveló las claves de su éxito: "el trabajo duro" y reconoció algo que nadie se puede imaginar cuando esta en la cumbre "sigo siendo la chica que nació en el Bronx con sueños y a menudo me siente como una novata. De hecho, nunca estoy de todo satisfecha con lo que hago y esto me obliga a continuar mejorando", declaró López. La cantante aseguró que en el terreno musical desearía trabajar con el cantante británico Craig David, mientras que en el apartado cinematográfico le gustaría compartir el plató con el protagonista de Gladiator, Russell Crowe.
