Tras lanzar dos colaboraciones con Tommy Hilfiger y con el cargo de embajadora para Lâncome, Valentino y Bvlgari a sus espaldas, la estrecha relación que Zendaya mantiene con la moda la ha convertido en icono de estilo a través de looks que oscilan entre lo transgresor y lo eterno.

Además de la ropa, la actriz mantiene un idilio con las piedras preciosas en sus presentaciones más majestuosas y originales, que satisface gracias a su alianza con Bvlgari. Esta casa joyera ha sido la encargada de varios de sus momentazos virales, como los 231,78 quilates de diamantes que lució en los últimos premios Oscar con un potente diseño cut-out amarillo de Valentino.

Del mismo modo que los seguidores de Elizabeth Taylor se interesaron por su vastísima colección de joyas, los millennial stans de Zendaya están al tanto de cada una de sus deslumbrantes apuestas. Y no es para menos, pues ella conoce bien el valor que aporta la orfebrería a cualquier estilismo, por muy impactante que este ya sea.

Sus seguidores redes sociales se han encargado de recalcar la importancia que ha tenido la visión de su estilista Law Roach, también encargado de configurar los posados virales de Anya Taylor-Joy, quien casualmente esta noche recibirá el premio el Rostro del Año. Coleman y Roach llevan trabajando juntos desde que ella tenía 14 años.

Si aún eres un escéptico del 'efecto Zendaya', deberías saber que en un período de 24 horas después de la premiere londinense de Dune, su último filme, las búsquedas online de vestidos de lentejuelas incrementaron un 151%, mientras que el aumento en búsquedas sobre el diseñador Rick Owens - autor de su escultural look aquella noche - subierton un 212%.