A pesar de ser dos estampados muy similares a lo lejos, la pata de gallo suele adaptarse principalmente a la moda invernal, mientras que los cuadros vichy, por su conexión histórica con la campiña francesa y el buen tiempo, renace con las flores en la primavera. A Tamara parece no importarle esta regla no escrita de la moda y ha sacado del armario un pantalón que contiene lo mejor de ambos mundos. Se trata de un diseño recto con estampado pata de gallo en un tono azul pastel, paleta de colores poco común para adornar dicho motivo, pues solemos verlo en tonos tierra, blanco y negro.