Es una de la 'top model' más codiciadas del mundo, sin embargo, cuando se apagan los focos, se quita sus trajes de diseño y se baja de los tacones, Kate Moss es una mujer como otra cualquiera que disfruta de las pequeñas cosas del día de día y, sobre todo, que aprovecha cada minuto que tiene libre para escaparse y estar con su familia.
Así, la modelo inglesa disfrutó de la compañía de su marido, Jamie Hince, y de un grupo de amigos, con los que aprovechó para irse al campo, respirar aire puro y estar unas horas desconectada de la rutina. Como una pareja de enamorados y luciendo estilismos de lo más informales, les vimos en el coche descapotable de color azul MG de la top recorriendo las calles de Cotswolds, una zona de colinas y campo que se encuentra en el centro-oeste de Inglaterra y que se conocen como el “Corazón de Inglaterra”.
Sin embargo, al día siguiente Moss tuvo que volver al trabajo y cumplir con sus compromisos profesionales. Radiante, con una gran sonrisa y muy chic con un vestido negro con falda vuelo y cremallera en el escote de Prada, la modelo llegó a un exclusivo evento que tuvo lugar en The Club at The Ivy de Londres. Kate completó con su look con un bolso de cebra diseñado por ella misma para la firma Longchamp y sandalias de colores de Christian Louboutin.
Por si su presencia no tuviera suficiente relevancia, tras bajarse del coche Moss protagonizó un instante al más puro estilo Marilyn Monroe, ya que debido al viento, su falda se levantó y estuvo a punto de enseñar más de lo que quería. Durante el acto, en el que la top presentó la colección de accesorios tecnológicos que ha diseñado para la firma Carphone Warehouse, coincidó con otros rostros conocidos como Sadie Frost, ex del actor Jude Law, o Pixie Geldof.
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