La Reian rescató del armario un vestido midi Chantilly color arena con diseño de cuello caja, de Felipe Varela. A la altura de las caderas, se transforma inesperadamente en lo más similar a un vestido de bailarina, gracias a su romántica falda vaporosa de encaje.

La elección de joyas tampoco ha sido casual. Repitió una combinación que le ha funcionado con anterioridad: un anillo con diseño hueco ovalado, de Karen Hallam, y unos pendientes en forma de flor realizados en nácar, de Yanes, que doña Letizia conserva desde sus días como Princesa.

En cuanto al calzado, la Reina tampoco ha pensado en estrenar, y es que no hacía falta, teniendo sus innovadores mules con tira ancha de PVC, de Steve Madden. Esta es una de sus apuestas predilectas en los meses cálidos, incluso posee un par idéntico en negro. 

Para conmemorar la Fiesta Nacional en 2018, doña Letizia no dudó en recurrir a uno de sus diseñadores de cabecera para actos emblemáticos, Felipe Varela. El resultado fue este look monocromático que volvemos a ver el día de hoy. En vista del fresco clima de octubre, añadió una chaqueta cruzada de crepé a juego con el vestido.

En aquel Día de la Hispanidad, la Reina llevó el pelo en un elegante recogido, a diferencia del peinado suelto y más juveil por el que ha optado hoy.