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Tras participar por primera vez en el acto conmemorativo del Día de ANZAC en honor a los soldados de las Fuerzas Armadas australianas y neozelandesas, Meghan Markle ha asistido junto a su prometido al Servicio de Conmemoración y Acción de Gracias, celebrado esta mañana en la Abadía de Westminster. Para esta cita marcada en rojo en la agenda real británica, la futura esposa de Harry de Inglaterra ha apostado sobre seguro llevando un tocado de uno de los sombrereros favoritos de la Duquesa de Cambridge. Es la segunda vez que elige un diseño de Philip Treacy desde que se conociera su compromiso con el Príncipe. Esta vez, es un modelo estilo casquete adornado con una libélula de pedrería en riguroso negro, acorde con el resto del look y mucho más sobrio que el que llevó en la Misa de Navidad el pasado mes de diciembre.
A menos de un mes para su boda, la futura esposa del príncipe Harry ha llevado un conjunto de Emilia Wickstead que, en esta ocasión, cobra un sentido especial. La diseñadora de este dos piezas es neozelandesa y residente en Inglaterra, en clara sintonía con el acto celebrado hoy. Además, es una de las firmas favoritas de la Duquesa de Cambridge, la gran ausente de esta velada tras dar a luz hace dos días, y una de las posibles candidatas, junto con Ralph & Russo, para confeccionar el vestido de novia que llevará el próximo 19 de mayo. En esta ocasión, ha utilizado una fórmula de estilo a la que recurría habitualmente en su etapa de actriz: falda lápiz y tops o chaquetas cropped.
Este conjunto se compone de una falda midi con cintura alta que consigue acentuar su silueta y una chaqueta cropped a juego, con manga tres cuartos y botonadura oculta. Es un diseño que se hace especial gracias a su tejido texturizado de color negro, que completa con la tradicional amapola roja en la solapa, en recuerdo a los caídos en la guerra. Como suele ser habitual en muchos de sus looks, vuelve a recurrir a unos clásicos stilettos que confirman su idilio con el made in Spain. Se trata del modelo BB, unos salones de ante negro firmados por Manolo Blanhik. Además, lleva un pequeño clutch rígido con boquilla y detalles metalizados de Jimmy Choo. Es el modelo J-Box y tiene un precio de 825 €.
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